La alegría no fue brasileña, ni en la cancha ni en las tribunas. Y es que mientras que en el campo de juego la selección de Italia pasó por encima a Brasil con un ajustado 3 a 2 por la primera fecha del Mundial Sub 20 de Argentina 2023, en las tribunas del estadio Malvinas Argentinas los mendocinos se encargaron de dejar bien en claro que Brasil jugaba más de visitante que nunca.
Ya desde la entrada en calor previa al partido, y que se hizo en el campo de juego, la silbatina de la multitud se focalizó en los jugadores brasileños. Todo se intensificó aún más al momento de los himnos, ya que los chiflidos se hicieron ensordecedores.
Y en el partido, que fue dominado al comienzo por Italia (aunque luego la azzurra terminó pidiendo la hora), no solo que los goles de la selección europea se gritaron como si fueran argentinos, sino que cada vez que los brasileños tenían la pelota, los silbidos bajaban sin piedad. Por supuesto, tampoco faltaron los “picantes” cantos de “Brasil, decime que se siente” o aquellos para seguir celebrando el Mundial de Qatar 2022 que ganó la Selección Argentina (en este caso, la mayor).
Pero aún con este entorno y clima, el color y el entusiasmo brasileño se las ingenió para hacerse sentir -aunque apenas perceptible, por momentos- en las tribunas del Malvinas.
La barra brasileña que le dio color a la fresca tarde
Minutos antes de que terminara el partido del primer turno -Nigeria contra República Dominicana- y con el fotógrafo y artista Dedé Vargas como “gran anfitrión, gran”, los hinchas brasileños comenzaron a situarse en la zona baja, al norte, de la platea techada.
Con banderas del país vecino y con camisetas verdeamarelas -y también azules, ya que es el color de la casaca alternativa-, los cariocas se encargaron de animar la previa del partido con sonrisas, selfies y muy buena onda. Ni siquiera el contexto hostil -futbolísticamente hablando- les borró esas sonrisas.
Dedé Vargas está radicado hace años en Mendoza y es una especie de coordinador de un gran grupo de ciudadanos brasileños que viven en la provincia. Periódicamente se reúnen a degustar platos típicos -acompañados de cócteles de su tierra atal también-, y en conjunto organizaron la ida al Malvinas para ver el debut brasileño en esta nueva edición del Mundial Sub 20.
Ya durante el partido soportaron estoicamente los 3 gritos de los mendocinos, quienes gritaron los goles del rival de Brasil como si hubiesen nacido en la mismísima toscana de Italia y hasta los escucharon dedicarles las infaltables canciones de cancha a la selección canarinha y a El Rey Pelé.
“Tomalo vos, dámelo a mí, el que no salta es de Brasil”, intercalados con el infaltable “Muchaaaaaachos” fueron parte de la banda sonora de la tarde, que se complementó con el provocador “ole, ole” cuando Italia dominaba a los sudamericanos en el resultado y en el juego.
Los dos goles de descuento de Marcos Leonardo a los 70 y a los 86 minutos volvieron a meter a Brasil en el partido, por lo que se emparejó anímica y futbolísticamente. Y también entusiasmó a los “mendo-brasileños”, aunque la reacción no fue suficiente para dar vuelta la historia.