Los futboleros hemos visto este gol miles de veces. Y cómo no hacerlo si es el más lindo de la historia. En 1986, ante Inglaterra en el Mundial de México, Diego Maradona crearía su obra máxima. Una apilada monumental desde mitad de cancha para dejar en el camino a más de medio equipo rival y anotar el 2-0 que sería fundamental para avanzar de fase. El barrilete cósmico.
Pero te mostramos en esta nota otro ángulo de aquella belleza en la que se observa desde otro punto del estadio Azteca la jugada que recorrería el mundo hasta el día de hoy. El video es de un aficionado que decidió, años después, compartir el material en internet.
Ese soleado día mexicano se instalaría para siempre en la memoria del fútbol universal no solo por este magnífico tanto, sino porque minutos antes había anotado con la mano el 1-0 en aquella recordada “mano de Dios”.