La F1 disputará la undécima fecha del año el próximo fin de semana en Hungría, la última antes del receso de verano europeo.
El Hungaroring tiene fecha de la máxima categoría desde 1986 y es uno de los trazados de la “vieja escuela” con sectores estrechos, muchas curvas encadenadas y partes de media y baja velocidad.
Pirelli Motorsport trae para Hungría tres compuestos de neumáticos: el C2 (duro), el C3 (medio) y el C4 (blando). Como el circuito tiene pocos lugares de adelantamiento, más allá de la recta principal, se espera que las estrategias de paradas puedan ser diferentes con el objetivo de ganar posiciones en el clasificador. En 2020, la prueba arrancó con pista húmeda así que la mayoría largó con gomas con dibujo antes de cambiar. Sin embargo, en 2019, con piso seco, hubo estrategias de una y de dos paradas.
“La mejor estrategia no siempre es obvia, con diferentes formas de afrontar la carrera que, a menudo, producen un tiempo de carrera general parecido, dependiendo de las circunstancias individuales. Por eso a veces hemos visto algunas carreras intrigantes tácticamente en Hungaroring, manteniendo el resultado en duda hasta el final y proporcionando un desafío interesante para los ingenieros”, confesó Mario Isola, director de Pirelli antes del Gran Premio de Hungría de Fórmula 1.
