Gimnasia e Independiente Rivadavia lideran las dos zonas de la Primera Nacional y ambos sueñan con meterse entre los que pelearán el ascenso.
Hace tiempo que el fútbol mendocino no vivía este presente, sobre todo en la principal categoría de ascenso del fútbol argentino. Es que con el triunfo de Gimnasia ante Mitre, en Santiago del Estero, el Lobo es uno de los líderes de la Zona A, mientras que con Independiente pasa lo mismo gracias al empate ante Güemes, de la misma provincia.
Si bien el presente es el mismo, las razones parecen diferentes.
Es que el Lobo viene trabajando hace tiempo con el mismo plantel y cuerpo técnico y se vio potenciado por la aparición de jugadores del club, refuerzos y Cristian Llama.
El “Pelado” es el jugador franquicia de Gimnasia y queda demostrado en cada partido. Ante Mitre marcó el mejor gol del torneo, mientras que ante Quilmes también dejó el sello de su calidad.
Pero cuando Llama no aparece, Diego Pozo se apoya en la mezcla justa de experiencia y juventud, donde es muy importante es despliegue de Santiago López e Iván Ramírez, los goles de Ramón Lentini, la habilidad de Santiago González, la seguridad de Sebastián Giobini y lo que pueden aportar jugadores que el entrenador conoce como Gabriel Vallés o el “Monito” Junco.
La Lepra, con nombre y apellido
Por el lado de Independiente Rivadavia el principal motivo de este presente tiene nombre y apellido: Gabriel Gómez. El Comandante cambió la cara y la cabeza de un plantel que no daba pie con bola con Marcelo Straccia y los resultados quedaron a la vista.
Con un juego sólido y apoyado en los experimentados, la Lepra manda en la Zona B.
Las decisiones de Gómez fueron vitales para este presente, ya que desde el minuto cero decidió revertir la situación de Cristian Aracena, quien pasó de ser cedido a Huracán Las Heras a ser vital en este momento azul.
La versatilidad que viene mostrando la Lepra es vital para este momento, puede jugar con línea de tres (o de cinco) o con línea de cuatro y la idea se sigue entendiendo. Otro ejemplo claro es ganar sin tener un “9” natural y atacar en bloque, así es que Diego Cardozo es el goleador sin ser un delantero de área.
Si bien el fútbol son momentos, hoy tanto Gimnasia como Independiente viven un presente que los invita a soñar, pero será vital la regularidad y tratar de mantener la idea, por eso es una ventaja tener a dos tipos como Diego Pozo y Gabriel Gómez en los bancos de suplente, ya que tiene una idea clara y no se atan a sistemas o nombres, algo vital para tener planteles totalmente motivados.
¿Y el resto?
El resto de los equipos mendocinos también tiene su análisis, pero tiene realidades diferentes.
Godoy Cruz navega en un mar de incertidumbres, ya que su andar por la Copa de la Liga Profesional es irregular y gana tanto como pierde. No tiene un equilibrio.
No extraña que el equipo del “Gallego” Méndez sea uno de los equipos que más goles ha convertido en el torneo, pero es el que más goles en contra recibió.
El Deportivo Maipú se está acomodando a la Primera Nacional y todavía le cuesta hacer pie, a pesar de grandes triunfos como el que logró ante Quilmes y el buen partido que hizo ante Tigre, a pesar de la derrota.
Mientras que Huracán Las Heras arrancó con el pie derecho en el Federal A, pero todavía falta mucho y nadie puede quitarle la ilusión de pelear por el ascenso.
