Lo que parecía ser la peor presentación de Independiente Rivadavia de local se terminó transformando, en un nueva guapeada del equipo del Parque que lo perdía 3 a 0 frente a Chacarita en el Malvinas y 10 minutos del final del partido el equipo de Gómez, casi lo dio vuelta, pero lo terminó perdiendo 3 a 2 en un cierre increíble, donde la figura del arquero Loza evitó que los Azules igualaran.
Un final que hizo vibrar el Malvinas con Independiente empujando y poniendo al Chaca contra un arco y lo tuvo Coronel, Vivani, Turraca entre otros, pero el tiempo es más que tirano. Y el Azul despertó tarde en un partido claramente dominado por Chacarita.
El equipo de Gabriel Gómez fue un puñado de insinuaciones frente a un rival sólido y de mucha jerarquía y que mostró su calidad en la primera llegada con golazo de Enzo Hoyos, tras una jugada personal de Godoy a los 14 minutos de juego.
No estaba cómodo ni en el medio ni en ataque el equipo del Parque, es que Vidal, Ruben y Navarro no lograron tener una buen asociación en el juego. Es que en le fondo Manchot,, González, Masoero y Perdono anticiparon cada intensión local.
La efectividad del Funebrero en cada subida fue un verdadero sufrimiento para la Independiente en lo defensivo, porque le no pudo contener nunca ni con la velocidad de Godoy ni mucho menos con la de Russo Cordero y cada vez que aparecieron o merodearon. A los 32 el golazo de Masoero dejo impávido al equipo del Comandante. Se fue sin nada al descanso y busco reactivar en el complemento.
Fue mejor su actitud, pero no para contrarrestar la contundencia del Funebrero, ya que los 8′ Russo Cordero , con el 3 a 0 puso un interrogante gigante en el banco local.
No había reacción y la vista estuvo más cerca del cuarto que la Lepra del descuento.
El ingreso del Turraca y Vivani le dieron otra dinámica al medio campo y la salida en los del Parque. Llegaron los goles de Quiroga y Coronel. Se despertó tarde de letargo, pero volvió a exponer esa garra y empuje como en otros tantos partidos donde dio vuelta el resultado, pero esta vez no le alcanzó.