Independiente Rivadavia hizo uso de su capacidad para golpear en los momentos claves y venció como visitante, 2-0, a Belgrano de Córdoba, en una noche donde el arquero mendocino Ezequiel Centurión fue la gran figura de la noche. Los goles leprosos llegaron a través del defensor paraguayo Iván Villalba y el delantero colombiano Sebastián Villa.
En el Julio César Villagra, en Barrio Alberdi, el encuentro tuvo un comienzo de mayor protagonismo para el Celeste, que reconocía su condición de local y las urgencias por volver a ganar tras el empate ante Barracas Central. Mientras, Independiente Rivadavia intentaba ser prolijo en el traslado, con orden defensivo y en la búsqueda de Sebastián Villa a partir de lanzamientos largos. Se jugaba en campo mendocino.
Sin embargo, pasado los 20′, la Lepra comenzó a mejorar y propuso un duelo más lejos de su arco. Con buenas intervenciones desde el costado izquierdo, el equipo mendocino inquietó con centros y algunas apariciones del delantero colombiano. Y a la salida de un córner, Franco Romero devolvió el balón al área y el defensor paraguayo apareció para abrir el marcador y darle una buena noticia a la Lepra.
Belgrano acusó el golpe y eligió dar un paso al frente en la búsqueda del empate. Mientras, el Azul no pasaba sobresaltos defensivos, controlaba muy bien a su rival y se predisponía para salir rápidamente de contragolpe.
Claro, el encuentro tampoco ganaba en emociones. Todo pasaba por las discusiones en cada balón detenido, el flojo arbitraje de Silvio Trucco y los abucheos de los simpatizantes locales.
En el arranque del segundo tiempo, Ezequiel Centurión se hizo un muro para tapar un cabezazo de Matías Suárez dentro del área chica. El Pirata reveló sus intenciones de ser un equipo más agresivo y se plantó desde el inicio del complemento en campo mendocino.
La Lepra consiguió sortear una vez más la intensidad cordobesa y de a poco se volvió a acomodar. Con Villa como única referencia para el ataque, Alfredo Berti paró un equipo compacto, que eligió sostener la mínima ventaja sin arriesgar más de la cuenta.
Y cuando el partido no tenía demasiadas emociones, Villa aprovechó un rechazo defensivo para encarar con balón dominado a una pasiva defensa pirata y, tras enganchar para su pierna derecha, clavó el balón al segundo palo. Golazo que amplió diferencias y estableció un valor real a los tres puntos en tierras cordobesas.
Sobre la media hora de juego, un centro de Esteban Rolón encontró la cabezazo de Nicolás Fernández encontró un manotazo salvador de Centurión, travesaño y el balón quedó bajo la humanidad del “1″. Enorme labor del exRiver para sostener el cero en su arco.
Y como no hay dos sin tres, Centurión volvió a lucirse un puñado de minutos después con un manotazo salvador ante un tiro libre de Suárez que pedía red. A esa altura de la noche, el “1″ mendocino era la gran figura del encuentro.
Pudo ampliar el marcador en el cierre Ezequiel Ham, pero perdió el duelo mano a mano con el arquero paraguayo Juan Espínola, tras un rebote que se había originado a un remate de Lautaro Ríos. Y de contra, el propio Ham reventó el travesaño en otro “cara a cara” con el “1″ pirata.
La Lepra cerró mejor la noche en Córdoba, donde sumó su segundo triunfo consecutivo y dejó en claro que Berti parece haber encontrado las claves para mejorar la campaña mendocina antes del cierre de la temporada.