Después de más de un mes sumando para la madre de todas las causas (la permanencia en Primera división), Godoy Cruz se vuelve para Mendoza con las manos vacías. La racha positiva se cortó en la vertiginosa noche santafesina. Polémica, por cierto. Porque Godoy Cruz convirtió tres goles y le anularon dos a instancias del VAR.
El primero, de Breitenbruch, estuvo bien invalidado. Porque antes de que la empujara el ex Defensa y Justicia, el balón termina rebotando en Ortíz, quién estaba adelantado cuando parte el centro de Martín Ojeda desde la derecha.
El segundo es el que invita a sumergirse en un mar de dudas. Porque en las primeras imágenes que muestra la tele después del empate de Bullaude da la clara sensación de que Gerometta habilita a Allende por el lado opuesto de la cancha. Sin embargo, la línea que se traza posteriormente indica que, a priori, Tadeo está adelantando por medio pie. Una cuestión incomprobable porque la línea es manipulada por la edición de un ser humano. Es decir, se puede trazar una milésima antes o después de que parta el pase. El balón debería tener un sensor (o chip) para saber fehacientemente el momento en el que el pie impacta el balón.
En ese momento, promediando la segunda etapa y con la estupenda definición de Bullaude tras el desborde de Allende por derecha, el equipo de la dupla alcanzaba un merecido empate. Y lo hacía con el plus de la épica, porque desde hacía varios minutos el Expreso jugaba con un hombre menos por la imprudente expulsión de Guillermo Ortíz. Una más y van… tres en este nefasto 2022 para el ex Colón y Aldosivi. Para colmo de males, el equipo de Orsi-Gómez ha sufrido cinco expulsiones en diez partidos, la misma cantidad de rojas que tuvo en la Copa de la Liga (14 jornadas en total). Un tema para trabajar y mejorar.
Antes y después de ese momento, Unión y Godoy Cruz protagonizaron un verdadero partidazo, con un ritmo frenético, intenso y electrizante. De ida y vuelta, con ataques directos de un lado y del otro. El Tomba sabía que un triunfo lo dejaría como escolta junto a Argentinos Juniors, a dos puntos del sorpresivo líder Atlético Tucumán. Y por eso no especuló ni siquiera cuando estuvo todo el segundo tiempo con uno menos.
Es verdad que Unión desperdició chances claras estando 1-0 arriba y también después del 2-0. Pero el Ruso Rodríguez volvió a responder de gran manera para dejar en claro que el Tomba tiene un arquero altamente confiable.
Entre las cosas positivas que dejó la derrota, además de la actuación del Ruso, Pier Barrios, Bullaude y Allende fue el ingreso de Enzo Larrosa. El joven delantero uruguayo de 21 años, que llegó de Boston River, hizo su debut con la camiseta del Expreso y en 16 minutos que estuvo en cancha se mostró como una alternativa válida para Salomón Rodríguez, quien tuvo un partido flojo. Su descuento sobre el epílogo de la noche, con un perfecto anticipo ofensivo de cabeza entre tres defensores de Unión, comienza a evidenciar un nuevo romance de un punta uruguayo con la camiseta del bodeguero.
Se viene una semana corta con varias cuestiones para mejorar y otras para seguir potenciando. Lo importante es que el Expreso respeta una identidad de juego, tanto en la victoria como en la derrota. La revancha de este mal trago en Santa Fe está a la vuelta de la esquina: el próximo viernes, a las 20 horas, Godoy Cruz recibirá a Vélez. Otra buena medida para saber si lo de esta noche fue solo un traspié que rápidamente quedará en el olvido.