Los Leones rugirán con fuerza en los Juegos Olímpicos de París 2024, pero antes de su debut el 27 de julio, la atención se centra en la particular historia protagonizada por Matthew Dawson un jugador de la selección australiana que dio mucho de qué hablar.
La semana pasada, Dawson sufrió una lesión en el dedo anular durante un entrenamiento, lo que lo puso en un aprieto. Las opciones eran dos: un tratamiento de 4 a 6 meses con posibles secuelas y la baja para los Juegos, o una decisión más radical: amputarse la parte superior del dedo.
El actual subcampeón olímpico con los Kookaburras precisó los detalles del incidente y su decisión en una charla con el periódico Le Parisien: “El jueves pasado, recibí un golpe con un palo de hockey en el dedo, bastante grave, y tuve que tomar una decisión rápida: tratar mi dedo con un clavo o cortar la primera falange. No tuve mucho tiempo para decidir, pero el cirujano me dio toda la información. El mejor escenario para mí era cortar la punta de mi dedo. Esto me daba una mejor oportunidad de participar en los Juegos Olímpicos y también para la vida después”.
Su decisión no estuvo exenta de dudas. “Ya había tomado la decisión y luego llamé a mi esposa”, le confesó a 7News. “Ella me dijo: ‘No quiero que tomes una decisión apresurada’. Pero tenía toda la información que necesitaba para tomar la decisión. Espero que no me lleve demasiado tiempo volver a estar en forma”.
Explicó por qué no eligió conservar su dedo por completo: “El médico no podía garantizarme que el dedo recuperaría plenamente sus funciones y probablemente habría tenido problemas a lo largo de toda mi vida, artritis en particular. Cortar la punta del dedo es un poco dramático al principio, pero era la mejor decisión a tomar”.
El jugador se entrenará con una protección en la zona hasta el debut contra Los Leones. “Se trata sobre todo de readaptarse, especialmente a la forma de sostener el stick”, señaló sobre los ajustes que deberá realizar.
Sobre la cirugía, Dawson expresó que salió “muy bien”, regresó a su casa el mismo día, el lunes ya estaba de vuelta en la cancha y el miércoles viajó hacia París. “Durante la operación, el cirujano dijo que mi dedo estaba apenas sostenido por un hilo. ¡Tuve suerte de que no se cayera en el campo!”.
“Recuerdo haber visto el hueso salir. Después, como le he dicho a muchas personas, es mi elección, mi decisión. Otras personas tienen problemas mucho más importantes”, añadió.
El entrenador del equipo australiano, Colin Batch, elogió la decisión de Dawson. “No estoy seguro de que lo hubiera hecho, pero él lo hizo, así que es genial”, dijo Batch. “Ha vuelto a entrenar. Sin duda ha puesto el listón muy alto para cualquiera que se rompa un dedo en el futuro, pero hay que felicitar a Matt; ha tomado esa decisión y, obviamente, está muy comprometido con jugar en París”.