Independiente Rivadavia vive días convulsionados, pero desde lo deportivo la noticia más conmocionante fue que el DT Marcelo Straccia le comunicó a Cristian Aracena que no será tenido en cuenta.
Esta noticia tomó por sorpresa al arquero, que hoy se entrena en forma diferenciada junto con el grupo futbolistas que también fueron separados del plantel.
En medio de toda esta situación se dijeron cosas que no son ciertas. Una de esas versiones indicaba que el “Piti” no había aceptado ser suplente, algo totalmente falso, ya que el entrenador leproso ni siquiera le dio la opción de pelear el puesto y sólo le comunicó que se tendrá que ir del club.
Una falta de respeto gigante para un referente del equipo y que fue lo más regular que tuvo Independiente en los cinco años que lleva cuidado los tres palos azules.
Esta situación obliga a Aracena a sentarse a negociar con el presidente, Carlos Castro, su salida del club y buscar nuevos horizontes. Claramente esta decisión tiene que ver con el grupo inversor que llegó a la Lepra y que impuso a Straccia como entrenador y que seguramente hará llegar a un arquero de su “empresa” o buscará darle minutos a Norman Brad Dayan, portero sudafricano que llegó de la mano de los “empresarios”... para pasar en limpio: negocios.
Hoy Aracena tiene que salir del club por cuestiones extrafutbolísticas porque ni de casualidad es el responsable del mal momento de la Lepra en la Primera Nacional, pero como en todos los clubes los referentes son los que pagan los platos rotos por las malas decisiones de la dirigencia o de los “colaboradores” que manejan el club.
