El fútbol femenino en Argentina vuelve a enfrentar un escenario ya conocido: la renuncia de jugadoras claves debido a las deplorables condiciones de trabajo.
Lorena Benítez, Laurina Oliveros y Julieta Cruz anunciaron este lunes su decisión de abandonar la Selección, emulando las renuncias masivas que ocurrieron tras el Mundial de Francia en 2019.
“La historia se repite. Después del Mundial de Francia de 2019 varias jugadoras presentaron su renuncia y ahora, cinco años después, Lorena Benítez, Laurina Oliveros y Julieta Cruz repiten la escena”, destacaron en sus comunicados en redes sociales, todos acompañados de fotos en blanco y negro y la palabra “tristeza”.
Desde Madrid, Estefanía Banini, quien fue excluida del equipo en el pasado, expresó su desilusión en una entrevista.
Las declaraciones de Estefanía Banini
“Lo primero que siento es tristeza porque se repite lo que vivimos hace unos años atrás. Me da mucha pena. Hay gente que todavía no entiende que uno no renuncia a la Selección, a lo que se renuncia es a los malos tratos, a muchas diferencias”, afirmó Banini.
La ruptura entre las jugadoras y la dirigencia no es nueva. Tras la Copa del Mundo de Francia, Banini no fue convocada para los Juegos Panamericanos, lo que marcó el inicio de un conflicto con el entonces DT Carlos Borrello. “Ni descanso, ni lesiones, ni permisos de mi club. Ganas sobran de estar en la Selección... El cuerpo técnico decidió dejarme afuera”, escribió Banini en aquel momento.
La situación precaria persiste. Lorena Benítez denunció la falta de profesionalismo y criticó la gestión de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), mencionando que durante los entrenamientos no les proporcionaban ni desayuno ni almuerzo. “La respuesta es siempre la misma: ‘no hay plata’”, agregó Benítez.
Banini también comentó sobre la falta de apoyo económico: “Al Mundial nos fuimos casi un mes y no se nos pagó. Estuvimos ahí gratis... no digo que el sentimiento no importe, pero mucha gente no entiende que es nuestro trabajo, que nosotras vivimos de esto y las condiciones no se acercan a lo que hay en el masculino”.