Godoy Cruz comenzó los trabajos de pretemporada con noticias que no cayeron del todo bien entre los hinchas tombinos.
Es que la dirigencia, encabezada por José Mansur, estaría a punto de cerrar un polémico acuerdo para la llegada de Guillermo Ortíz, defensor que proviene de Atlético Tucumán: pagará 500 mil dólares al Decano más el 70% del pase de Renzo Tesuri, una de las figuras que tuvo el equipo durante los últimos dos torneos.
Acá hay que desmenuzar la operación.
Primero hay que decir que la llegada de Ortíz es más que positiva, ya que es un futbolista de experiencia y con más de 200 partidos en Primera y es un refuerzo que la dirigencia tombina quería hace tiempo, ya que sonó en el mercado de pases anterior y justo en un lugar que el equipo necesita reforzar por la baja de Mauro Dos Santos y porque fue el equipo más goleado de la última Copa de la Liga Profesional.
Con el arribo de Ortíz y el regreso de Tomás Cardona (se sumará al equipo en Buenos Aires), el “Gallego” Méndez tendría cubierto la zona defensiva con jugadores de experiencia, como había pedido… pero lo polémico es la forma de pago del defensor.
Es que la llegada del zaguero costará 500 mil dólares más el 70% del pase de Tesuri, quien ya viajó a Tucumán y se sumará a Atlético.
La gran pregunta es: ¿era Tesuri un jugador para desprenderse cuando fue uno de los mejores futbolistas de Godoy Cruz? Sin dudas que no porque el ex volante de Ferro fue una de las grandes apariciones con 4 goles en 19 partidos.
Tratando de entender la salida del volante sólo se puede justificar por la autorización para que Jeison Chalá por fin pueda debutar con la camiseta de Godoy Cruz y Méndez tendría dos jugadores de características similares y se habría inclinado por el ecuatoriano.
A la casi segura llegada de Ortíz hay que sumar la de Manuel Llano, lateral-volante derecho que llega de Newell’s y Martín Argüello que arriba desde Sportivo Belgrano de San Francisco.
