La bandera de Afganistán aparecerá mañana en la ceremonia de inauguración de los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 como “señal de solidaridad” con los atletas afganos que no podrán participar del evento deportivo por la situación de su país.
Un representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) portará la bandera afgana en la ceremonia que tendrá lugar en el Estadio Olímpico de Tokio, anunciaron hoy responsables de la organización.
Se trata de “un gesto de solidaridad” con los atletas de un país que no podrán estar en Tokio debido a la situación de su país después de que los talibanes tomaran el control de la capital, Kabul, según dijo este lunes el presidente del Comité Paralímpico Internacional (CPI), Andrew Parsons, en rueda de prensa.
Los organizadores aspiran a que la presencia de la bandera sea “un mensaje de paz” para el resto del mundo, descrito Parsons en la víspera de la apertura de los Paralímpicos, que tendrán lugar en la capital nipona hasta el próximo 5 de septiembre.
La taekwondista Zakia Khudadadi y el atleta Hossain Rasouli estaban previstos estar en Tokio en representación de Afganistán, pero no podrán hacerlo debido al cierre de los vuelos comerciales del aeropuerto de Kabul y la compleja situación de seguridad en su país. Quien sí competirá en Tokio será el nadador Abbas Karimi, nacido en Afganistán pero que formará parte del equipo de refugiados, debido a que se fue de su país con 16 años.