Oreste Berta es una de las grandes figuras del automovilismo argentino y a lo largo de sus años ha compartido experiencias con los mejores pilotos y personalidades destacadas de todo el mundo.
“Tuve la fortuna de ser el disparador para el reencuentro de dos grandes del automovilismo mundial: Juan Manuel Fangio y don Enzo Ferrari” le contó Berta en una entrevista exclusiva a Carburando.
Mientras estaba de viaje por Europa con Fangio, Oreste Berta buscaba cumplir un sueño desde su juventud: conocer Ferrari. Había un detalle, el gran campeón argentino y don Enzo Ferrari estaba distanciados. Pero para el Quíntiplue no fue un impedimento para que Berta cumpliera su objetivo. Viajaron a Maranello y Fangio lo esperó en el restaurante Il Cavallino, frente a la fábrica.
Berta ingresó con un ingeniero que conocía y que trabajaba allí y disfrutó de la didáctica recorrida por la mítica planta automotriz. Los empleados se agachaban al pasar frente a la ventana de Il Comendattore para no ser vistos por Don Enzo, ya que su malhumor era esquivado por todos.
Pero en un momento salió de su oficina y preguntó quién era el extraño. Berta le explicó que había ido con Fangio. Para sorpresa de Ferrari, le preguntó donde estaba. Ante la respuesta, Don Enzo se cruzó junto con Berta y allí se reencontraron Fangio y Ferrari, después de muchos años. “Hablaron bastante y terminaron muy bien”, destacó Berta en su libro autobiográfico.
Como recompensa, Berta se dio el gusto de subirse a una Ferrari 275 GTB manejada por el propio constructor. Pese al consejo de Fangio de no subirse con Il Comendattore, Oreste no resistió la tentación y recorrió los caminos de Módena con Don Enzo al volante.
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