El fútbol brasileño mostró una de sus peores caras en un partido por la tercera división del fútbol de ese país.
Es que la policía reprimió con gas pimienta a los futbolistas del Treze FC cuando fueron a protestarle al árbitro, ya que su rival (Manaus) empató el partido en el minuto 53 del segundo tiempo.
La situación fue tras 7 minutos de descuento Manaus llegó al empate y los jugadores de Treze se sintieron perjudicados por el árbitro y lo rodearon para protestar enérgicamente y por eso tuvo que intervenir la policía.
La temperatura entre los jugadores y los uniformados fue creciendo hasta que uno de los policía arrojó gas pimienta en la cara de los jugadores, algo que desató la locura.
El club Treze FC emitió un comunicado, acompañado de un video, donde se puede ver que uno de los policías agredió con un bastón al arquero Andrey y eso generó que los futbolistas reaccionen violentamente.