Aquella noche en Belo Horizonte donde, tras caer ante Atlético Mineiro y quedar eliminados en los octavos de final de la Copa Libertadores, Boca Juniors protagonizó un escándalo no quedó como una simple anécdota, de calentura. Habrá consecuencias por los daños causados por la delegación argentina y este martes comienza la audiencia en Conmebol, para sancionar a los culpables.
Este martes inicia la etapa de testimonios en Conmebol y para ésta, fueron citados 14 futbolistas del plantel de Boca que estuvieron convocado para aquel encuentro. La audiencia será vía Zoom. Los citados son: Carlos Izquierdoz, Carlos Zambrano, Marcos Rojo, Sebastián Villa, Diego González, Leandro Somoza, Fernando Gayoso, Cristian Pavón, Javier García, Marcelo Delgado, Raúl Cascini y Jorge Bermúdez, entre otros.
El pasado 20 de julio, Boca se presentó en el estadio Mineirao por el partido de vuelta y, al igual que en la ida en La Bombonera, le anularon un gol vía VAR, para luego caer por penales.
Esto generó la tremenda bronca que se trasladó a los vestuarios, donde luego de trenzarse con los rivales y personal de seguridad del lugar. Por lo cual, la delegación finalmente debió pasar la noche en la comisaría.
Al día siguiente, el Presidente de Boca Jorge Amor Ameal publicó un comunicado justificando la reacción del equipo xeneize.
“El Club Atlético Boca Juniors, institución de 116 años de historia, sufrió en esta serie de Copa Libertadores ante Atlético Mineiro dos fallos inexplicables anulando goles lícitos que destruyeron el espíritu deportivo del torneo más prestigioso del continente”, comenzó dicha publicación en el sitio oficial del club.
Luego agregó que desde la interpretan “ y de manera maliciosa e intencionada la tecnología VAR. Y se puso en dudas el manejo de Conmebol: “dejan en manifiesto el manejo tendencioso de nuestro fútbol continental”.
Al finalizar apuntan al Mineiro y justifican: “Tampoco podemos dejar pasar el hecho que desde la máxima autoridad del Club Atlético Mineiro se fogoneó con expresiones violentas y amenazantes durante varios días hasta llegar a los lamentables hechos en los que fueron damnificados físicamente nuestros jugadores, cuerpo técnico y dirigentes, quienes tuvieron que estar demorados por más de 12 horas en situaciones lamentables con el fin de no romper la burbuja sanitaria”.
“Una vez más hemos sido perjudicados por decisiones que poco tienen que ver con lo deportivo y mucho con el manejo arbitrario de una competición que no lo merece”, concluye..