La galería es tan larga y sus pasillos están tan llenos de nombres que para el hincha tombino se hace difícil elegir con cual quedarse. Los “Héroes del barro” se mezclan por caso con los de la fría noche en el estadio Malvinas ante Nueva Chicago. “Hay recuerdos que no voy a borrar, personas que no voy a olvidar...”, canta Fito Páez, mirando a una tribuna enamorada que entona un himno cantado con el corazón: “Tomba, mi buen amigo, esa campaña volveremo’ a estar contigo...”.
Y ese grito de guerra se hizo voz en las tribunas del Diego Armando Maradona, en el barrio de La Paternal, la tarde del domingo 6 de agosto de 2006, cuando a las 15.30, el silbato de Javier Collado decretó el retorno oficial de Godoy Cruz a Primera División. Aquella vez, en lo que fue la primera derrota de una temporada que no iba a terminar como muchos esperaban, unos mil simpatizantes hicieron el aguante a los mendocinos. Sin embargo, el gol de tiro libre del “Polo” Quinteros no permitió una tarde redonda en el coqueto barrio porteño.
Fue una temporada donde los hinchas de Godoy Cruz vivieron entre nubes, disfrutando de un sueño que se hizo desear. Y mucho. Aquel Apertura, marcado por pocos triunfos y un par de empates, tuvo un valor afectivo que se extendería al Clausura, antes de retornar a la segunda categoría del fútbol doméstico.
Y para festejar el primer triunfo hubo que esperar hasta la fecha 10, cuando el Rojo de Avellaneda visitó Mendoza y se llevó un 3-1 inapelable en favor del Bodeguero. Fue el inicio de una paternidad que hoy queda registrada en el historial entre ambos. Desde 2006 se enfrentaron en 18 oportunidades: Godoy Cruz ganó 7 veces, perdió 4 e igualaron en 7 ocasiones.
La campaña en el Apertura lejos estaría de ser la ideal. Apenas 17 puntos sumó en esas primeras 19 fechas, donde registró resultados inolvidables como el empate 0-0 en cancha de Boca o el 3-3 en cancha de Lanús.
En el Clausura mejoró notablemente la producción y elevó la cantidad de puntos conseguidos a 25. Ya había otro ritmo en el equipo y quedó de manifiesto en la inolvidable noche en el José Amalfitani, donde River Plate hizo de local. Aquella vez, sobre la hora, con una magistral asistencia de Enzo Pérez, Nicolás Olmedo estampó el primer triunfo del Tomba en Primera División ante el Millonario.
Luego llegaría la fatídica promoción ante Huracán, con derrotas 2-0 y 3-2, que lo condenaron a volver a la B Nacional. Sin embargo, solo fue tomar impulso para volver con todo.
Hitos de aquella campaña
Triunfo ante el Rojo. La primera victoria en aquel Apertura 2006/2007 fue 3-1 ante Independiente, en el estadio Malvinas Argentinas, por la fecha 10. Los goles mendocinos fueron de Mauro Poy, Hernán Buján y Diego Villar.
Empate en La Bombonera. En su primera visita a Boca, el conjunto dirigido por Juan_Manuel Llop le sacó un empate y le cortó una racha de 12 triunfos consecutivos. Aquel día, Ricardo Lavolpe dirigió su primer partido como DT del Xeneize.
El primero en el Malvinas. Gimnasia de Jujuy fue el primer equipo que visitó al Tomba en el estadio mundialista, en Primera División aquella temporada. El resultado en ese sábado de agosto fue un apático 0-0.