El presidente de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), Gianni Infantino, se refirió al beso que le dio Luis Rubiales a la jugadora Jenni Hermoso en la final del Mundial de Fútbol Femenino.
“Lamentablemente, la merecida celebración de estas magníficas campeonas se vio empañada por lo que sucedió tras el pitido final. Y lo que siguió ocurriendo en los días posteriores”, escribió Infantino en su cuenta de Instagram.
“Esto no debería haber ocurrido nunca. Pero sucedió y los órganos disciplinarios de la FIFA asumieron inmediatamente su responsabilidad, tomando las medidas necesarias. Los procedimientos disciplinarios seguirán su curso legítimo”, añadió.
La FIFA abrió el 24 de agosto un expediente disciplinario contra Luis Rubiales y luego le suspendió provisionalmente de toda actividad en el fútbol, nacional e internacional, durante noventa días, mientras se investiga lo ocurrido.
“Por nuestra parte, debemos seguir centrándonos en cómo seguir apoyando a las mujeres y al fútbol femenino en el futuro. Dentro y fuera del terreno de juego. Defendiendo los verdaderos valores y respetando a las jugadoras como personas, así como sus fantásticas actuaciones”, agregó Infantino.
Luis Rubiales fue además denunciado por el gobierno español ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de su país, informó la agencia de noticias AFP.
Si el TAD, competente en España en materia deportiva, estima admitible la denuncia del ejecutivo y decide abrir expediente, el gobierno podrá entonces, en un plazo de 48 horas, suspender de sus funciones a Rubiales hasta que el caso sea juzgado en el fondo de la cuestión.
Los presidentes de las Federaciones regionales del fútbol español, convocados por el presidente interino Pedro Rocha, solicitaron el lunes la dimisión de Luis Rubiales.