Rodrigo Rey, arquero de Independiente, no vive uno de sus mejores momentos junto a su familia: el colegio de su hijo Benicio, diagnosticado con trastorno del espectro autista (TEA), les comunicó que no le darán vacante el año próximo. Tampoco le darán lugar a su hija mayor, Renata. Ante este escenario, el futbolista expuso su situación en las redes sociales y desde el Rojo le brindaron todo su apoyo.
Cabe destacar que este conflicto de Rey con el colegio al que va su hijo tiene larga data. Hace algunos meses, el deportista tuvo que recurrir junto a su esposa a la exposición mediática del tema, ya que el establecimiento no le brindaba a Benicio un lugar apto para desarrollarse de acuerdo al trastorno que tiene.
En las últimas semanas, desde el colegio le comunicaron a la familia que no les darán vacantes para el próximo año. En medio de la desesperación, desde Independiente decidieron respaldar y tratar de ayudar a su figura. Para eso, postearon un fuerte comunicado en las redes sociales para contar cómo está el conflicto.
“La Comisión Directiva del Club Atlético Independiente informa a socios, socias, simpatizantes e hinchas que acompañamos a la Familia Rey en esta situación inadmisible que les está tocando atravesar”, destacaron desde el club. Además, apuntaron directamente contra el colegio y sus malos manejos: “La discriminación en todas sus formas nos resulta inaceptable como institución. Cuesta creer que un establecimiento educativo religioso, no contemple los deseos de una familia que solo busca el bienestar educativo y afectivo de sus hijos”.
Y sumaron: “Por el contrario, sus autoridades decidieron escoger el camino del acoso legal y el incumplimiento a la normativa que le aplica en materia de educación inclusiva, tomando represalias sin importar si la estabilidad emocional de Benicio y Renata estaba en juego”. Por último, dejaron un fuerte mensaje para la Justicia, que es la que está llevando adelante este conflicto: “Instamos a la Justicia a resolver de forma justa, ecuánime y rápida esta situación que pone en riesgo la escolaridad y el entorno cotidiano de dos niños que solo desean seguir conviviendo con los amigos que han cosechado en sus años de colegio”.
“Al mismo tiempo, seguiremos trabajando en silencio utilizando todas las herramientas posibles para lograr que el colegio recapacite y permita que el año que viene Renata y Benicio sigan creciendo junto a sus actuales compañeros”, concluyeron.