Deportivo Maipú pasó de la risa al llanto en el complemento del choque disputado en el barrio de Caballito: lo ganaba 2-0 y terminó repartiendo puntos tras el 2-2 final ante Ferro Carril Oeste.
El Cruzado comenzó a ganarlo desde un penal que no fue. Un centro de Almirón pegó en la mano de Lorenzo, que se lanzó al piso y llevaba por detrás del cuerpo, y decretó el error de Franco Acita. Insólita sanción que Sosa, el goleador del Botellero, cambió por el festejo visitante.
Aún con la bronca a cuestas por el penal sancionado, Ferro fue en busca del empate y consiguió hacerse del balón y las mejores situaciones. Deportivo Maipú retrocedió obligado por la intensidad de los de Caballito y sufrió más de la cuenta en su arco. El enorme trabajo del arquero uruguayo Sebastián Sosa impidió el empate “verde” durante los primeros 45 minutos. El exVélez fue clave con atajadas determinantes.
Y si Deportivo Maipú tiene en su arquero una gran figura, también cuenta con otra en ofensiva. Mientras Ferro presionaba e insistía en la búsqueda del empate, Misael Sosa le sacó jugó a un contragolpe tremendo para cruzar su remate y establecer el 2-0. Sin contar con demasiadas chances, el conjunto mendocino estaba arriba en el marcador y sumaba un triunfo de “seis puntos”.
Sin embargo, llegó otro yerro de Acita, quien cobró penal de Felipe Coronel sobre Federico Murillo y el descuento “verde” devolvió los nervios al elenco de Juan Manuel Sara. Ricardo Blanco fue el encargado de vencer la estirada del arquero uruguayo. Y apenas un puñado de minutos después, dos para ser exactos, llegó otra intervención de Blanco, con un magistral pase cruzado, para la llegada de Mateo Levato, quien de cabeza le cambió el palo a Sosa e igualó las acciones. A esa altura, Maipú era un cúmulo de tensiones y no conseguía salir del asedio al que lo había sometido Ferro Carril Oeste.
Los cambios que llegaron desde el banco mendocino no fueron una solución a la anemia ofensiva del Botellero y la pelota siguió siendo propiedad de los de Caballito.
Tras el empate, Ferro incrementó su deseo de quedarse con la victoria y fue momento de sufrir para Maipú.
El empate final le dejó un sabor amargo al elenco mendocino, que reconoce la oportunidad desperdiciada, ya que sigue fuera de zona de clasificación al Reducido.