Bernie Ecclestone ya no forma parte de la dirigencia de la Fórmula 1, pero sigue involucrado en los pormenores de la máxima categoría. Además, el ex mandamás es palabra autorizada en los medios y siempre deja cosas importantes por su estilo directo y sin vueltas.
En este caso, Ecclestone habló sobre la realidad de Ferrari y señaló de forma tajante que el problema de la escudería de Maranello es la gran presencia de italianos. “Sin ofender, pero siempre he creído que el problema son los italianos: todos quieren liderar y tienen sus propias ideas. No estoy diciendo que debamos despedirlos como se hace con los corruptos, pero debemos atraer a alemanes, franceses, ingleses, personas que piensan de manera diferente”, le manifestó al diario La Stampa.
En base a eso, el británico puso como ejemplo cómo se dio la llegada de Jean Todt al equipo. “Lo que pasó con Jean Todt es significativo: los italianos no lo querían, les convencí para que lo ficharan y luego las cosas salieron bien”, aseguró.
Por otro lado, Bernie señaló que la única persona de esa nacionalidad con la que contaría sería con Flavio Briatore porque “al menos pondría a la gente adecuada en cada sitio, tiene buenas ideas y no es político”.
En el final, Ecclestone se refirió al puesto que ocupa Mattia Binotto. “Está en una posición muy incómoda. No sé si alguna vez quiso ser jefe de equipo. Es un ingeniero y siempre se ha ocupado de cuestiones técnicas. Lo que se necesita en Maranello es un buen gerente que coloque a las personas adecuadas en los sitios correctos”, cerró.