Juan Martín Del Potro se despidió del tenis y lo hizo a lo grande, en una tarde repleta de emoción, enfrentando a Novak Djokovic en el estadio Mary Terán de Weiss del Parque Roca, en una gala denominada “El Último Desafío”.
El deportista argentino recibió sus últimas ovaciones frente a la leyenda serbia y le dijo adiós a un deporte que le trajo las mayores felicidades en su vida y que también le hizo padecer dolores en su cuerpo que hasta el día de hoy lo aquejan.
Recordemos que el extenista que llegó a ser N° 3 del mundo cuenta con un palmarés compuesto de 22 títulos, que incluye un US Open y dos medallas olímpicas (bronce en Londres 2012 y la plata en Río de Janeiro 2016), todas conseguidas antes de sufrir una fractura de la rótula derecha, de la que nunca se recuperó por completo, por lo que jugó su último encuentro oficial en febrero de 2022.
Del Potro vs Djokovic, un encuentro a pura emoción
Novak Djokovic, actual N° 7 del mundo, ingresó al terreno de juego bajó una estridente ovación por parte del público argentino. Luego le llegó el turno de Delpo y el estadio se vino abajo. En el momento de las presentaciones, los acompañó Gabriela Sabatini y antes de iniciar la contienda, Abel Pintos apareció para emocionar a todos para cantar “Motivos” y entregarle su guitarra a modo de ofrenda.
En esta exhibición, el serbio entendió a la perfección su lugar y fue el mejor partener que el tandilense pudo conseguir, ya que no solo demostró pinceladas de su juego, sino que también se prestó a algunos shows entre game y game, destacando su imitación de Rafael Nadal.
Tras un primer set de alto vuelo, Del Potro presentó a dos amigas y extenistas como Gisela Dulko, exnúmero 1 en dobles femenino, y la histórica Gabriela Sabatini. La primera ofició como compañera del serbio, mientras que la ganadora del US Open fue la socia de la Torre de Tandil.
El dobles de estas leyendas no pudo ser mejor y la dupla nacional se impuso ante sus rivales 2-1. Luego las deportistas femeninas se retiraron y dieron paso a la pareja protagonista, quienes regalaron destellos de su magia en la cancha, pero también con momentos graciosos para divertir a la gente en todos los panoramas.
El resultado de 6-4 y 7-5 de Delpo fue anecdótico, donde el homenajeado recibió el cariño de su público y Nole demostró estar a la altura, siendo el maestro de ceremonia, entregando el último punto y pidiendo aliento y ovación para su amigo.
Entre lágrimas, la Torre de Tandil se despidió frente a su público, colgando su icónica vincha en la red, a la cual le dio un beso de despedida.