Alpine es una marca que toma notoriedad tanto en el mundo del automovilismo como en otros ámbitos. Este lunes, en el marco de la clásica entrega del Balón de Oro 2021 en París, un auto de la fábrica fue el responsable de transportar los trofeos.
Se trata del Alpine A110S, un modelo renovado, que cuenta con los rasgos clásicos de la terminal y algunos aspectos modernos. La unidad que cargó el Balón de Oro está equipado con un motor turbo que entrega 300hp y 320 Nm de par, acelera de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos y alcanza los 260 km/h con un peso de 1140 kg.
Además, el modelo tiene chasis, frenos y asientos Sport con pedales de aluminio y butacas Racing hechos en microfibra. Está provisto de neumáticos Michelin semi-slick, lo que permite tener mayor condición de agarre en el asfalto.
“La historia de Alpine y el Balón de Oro arrancan con un año de diferencia, respectivamente en 1955 y en 1956, y sus creadores parten de una ambición similar: destacar la eficacia en sus ámbitos respectivos. Valiéndose así de una herencia común, esta asociación permite celebrar la excelencia deportiva así como los valores universales que hoy encarnan ambas entidades: la superación personal, el respeto, la deportividad y la excelencia. Todos estos elementos son los que hoy otorgan a Alpine y al Balón de Oro su reconocimiento en el escenario internacional”, comentó la marca francesa en un comunicado de prensa.
La gran sorpresa de la noche en la gala de Balón de Oro fue que los encargados de custodiar el trofeo fueron nada menos que Fernando Alonso y Esteban Ocon, pilotos del equipo Alpine de Fórmula 1.
Después de subir al escenario, los pilotos dejaron los premios en el estrado, se quitaron los cascos y contaron cuál es su relación con el fútbol. “Fernando es un fan del Real Madrid y yo del PSG, nos gusta mucho”, manifestó Ocon, quien jugo a su compañero de equipo aprovecharon el evento para llevarse algunas camisetas firmadas.