A un mes del Mundial de Qatar, un nuevo conflicto parace poner en riesgo a uno de los participantes de la máxima competencia de selecciones, ya que por conflictos políticos que está sufriendo Irán, sus deportistas están pidiendo que la FIFA descalifique a su país del torneo.
“La brutalidad y la beligerancia de Irán hacia su propio pueblo ha llegado a un punto de inflexión que exige una disociación inequívoca y firme del mundo del fútbol y del deporte”, reza parte del comunicado que lleva la firma, entre otros, de los excapitanes del seleccionado Ali Karimi y Mehdi Mahdavikia, así como también de los exjugadores Mehrdad Pooladi y Behshad Yavarzadeh y que publicó el estudio de abogados español Ruiz-Huerta y Crespo.
Luego, agregan: “La abstención histórica de la FIFA ante los atolladeros políticos a menudo solo se ha tolerado cuando esas situaciones no hacen metástasis en la esfera futbolística. El fútbol, que debería ser un lugar seguro para todos, no es un espacio seguro para las mujeres, ni siquiera para los hombres. A las mujeres se les ha negado sistemáticamente el acceso a los estadios de todo el país y se las ha excluido sistemáticamente del ecosistema del fútbol en Irán, lo que contrasta con los valores y los estatutos de FIFA”, resaltan.
El país de Medio Oriente atraviesa una situación política y social convulsionada desde que Mahsa Amini, de 22 años, fuera asesinada por la policía de la moral por no llevar su hiyab correctamente. Además, a modo de protesta, la escaladora Elnaz Rekabi, quien compitió en una prueba sin el tradicional hiyab.
