Las anécdotas y recuerdos sentidos sobre la vida de Diego Armando Maradona recorren el mundo tras el fallecimiento del Diez. Muchos de ellos son de alto impacto emotivo, aunque hay uno que realmente eriza la piel y salió de la boca de Dalma Salvadora Franco, más conocida como Doña Tota, la mamá del eterno ídolo argentino.
Hace muchos años, Doña Tota ofreció detalles del día del nacimiento de Diego, aquel 30 de octubre de 1960, y la oportunidad es óptima para rememorar sus palabras, tan increíbles como fantásticas.
“Diego fue el que menos trabajo me dio. Bailé toda la noche del 29. Cuando me bajé del tranvía cerca del policlínico de Lanús, en el suelo había una estrella con perlas. La levanté. Entré con los dolores naturales del parto y a las 7.05 nació el Pelusa. Y mire lo que son las cosas, los médicos y las enfermeras se pusieron a gritar gol, “goool” gritaban. Como si supieran. Entre ellos se miraban y comentaban, decían “este sí que es macho, es puro músculo, la felicitamos, señora”.
La historia cuenta que ese día, el hospital había recibido a 11 nenas consecutivamente. Y que Diego llegó para cortar la racha. De ahí el “festejo” de los médicos, que no sabían lo que significaría su grito de gol años después.