Sin importar la cantidad de países participantes, las dos mejores actuaciones de Argentina se produjeron en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928 y Londres 1948, donde el país obtuvo siete medallas en cada uno, incluidas tres de oro en ambos casos.
Sin embargo, si se tiene en cuenta la cantidad de países participantes, las mejores actuaciones se dieron en Atenas 2004 y Pekín 2008, logrando seis medallas en cada edición, con dos de oro.
En los Juegos Olímpicos de Ámsterdam 1928, Argentina vivió uno de sus momentos más brillantes en la historia del deporte. En esta edición, el país sudamericano se alzó con un total de siete medallas: tres de oro, tres de plata y una de bronce.
Las medallas de oro fueron conquistadas por los boxeadores Víctor Avendaño y Arturo Rodríguez Jurado. Por otro lado, Alberto Zorrilla, consiguó la primera meddalla olímpica de toda América Latina en Natación.
Veinte años después, en los Juegos Olímpicos de Londres 1948, Argentina volvió a brillar con igual intensidad. Nuevamente, los atletas argentinos obtuvieron siete medallas: tres de oro, tres de plata y una de bronce.
En esta edición, se destacaron Delfo Cabrera en maratón, Rafael Iglesias en boxeo y Pascual Pérez en boxeo también, quienes trajeron las medallas de oro al país. Esta participación reforzó la posición de Argentina como una potencia deportiva en el ámbito olímpico.
Atenas 2004 y Pekín 2008
Con el paso del tiempo y el aumento de la cantidad de países participantes, las competiciones se volvieron más desafiantes. No obstante, Argentina demostró su fortaleza en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y Pekín 2008. En ambas ediciones, los atletas argentinos lograron un total de seis medallas, con dos de oro en cada caso.
En Atenas 2004, las selecciones de fútbol masculino y de básquetbol se coronaron campeonas olímpicas, mientras que en Pekín 2008, el fútbol masculino volvió a obtener el oro y el ciclismo en pista añadió otra medalla dorada.
