Julieta Benedetti le ha dado muchas satisfacciones al ciclismo mendocino (y argentino), porque supo calzarse la malla celeste y blanca en tres disciplinas distintas dentro de este deporte desde muy chica. Y aunque sus 19 años indiquen que aún lo es, ya probó que tiene vasta experiencia para dar el salto a la alta competencia de Europa. Más Deportes dialogó con ella para contar sobre su gran presente en Portugal, cumpliendo sueños.
La ciclista mendocina decidió en marzo de este año dar el salto dentro de su carrera deportiva, porque después del Mundial en Escocia se embaló para correr en la Doble Bragado donde salió segunda en su categoría, y por su performance la invitaron a formar parte del equipo femenino de Maiatos, en Portugal. Y no lo dudó.
Por lo que la lujanina se convirtió así en la segunda mendocina con oportunidad de crecer en el ciclismo europeo, después de la tuniyanina Luli Roland (28), quien corrió en Suiza y actualmente en España.
Julieta se fue a la ciudad portuguesa de Gouveia para “cumplir mis sueños. Mi objetivo era estar acá y seguir creciendo como deportista y poder ser mejor ciclista. El nivel del ciclismo europeo es muy alto y es lo que necesitaba para poder estar a la altura de los mejores en el mundo”, confió la pedalista que es tan especialista en ruta, como en pista y mountainbike.
En tan poco tiempo, Benedetti comienza a sentir el desarraigo, pero “los amigos, la familia y toda mi gente me apoya. Y cada detalle me hacen sentir que la distancia es corta. A la vez ellos entienden que este es un paso importante para mi carrera profesional y me siento completamente acompañada”, aseguró la mendocina, quien sabe que “es muy difícil como deportista salir del país para cumplir sus sueños” y pocas mujeres lo logran.
-¿Cómo te venís adaptando a las costumbres, idioma y cultura?
-Con el idioma, la verdad que fue difícil la primera semana. Después te acostumbras pero siempre uno trae las propias en el corazón, y obviamente voy con el mate para todos lados.
-¿Con el poco tiempo que llevas en Portugal, Europa, que se te viene a la mente que se podrías mejorar en nuestro país para que el ciclismo en general crezca? ¿Y qué, para el femenino?
-Se necesita mucho apoyo, no sólo de parte de entes estatales sino también de empresas, que inviertan en el deporte. Se necesitan carreras para subir de nivel y con ellas marcas que apoyen, que formen equipos, para que cada ciclista tenga ese sentido de pertenencia de defender una camiseta. Hay muy pocos equipos en el ciclismo femenino y menos en Mendoza. En Argentina corro con la camiseta del Roak- Pave, de Buenos Aires, que pone todo su esfuerzo por conseguir cosas para que no nos falte nada al momento de competir. Pero son pocas las marcas que apoyan.
-¿Tenés llamado y/o compromisos para la Selección Argentina?
Este año, al estar acá corriendo para el Maiatos es mi principal compromiso. Hablé con la gente de la Selección Nacional explicándoles mi situación y obviamente les dice que estaba a disposición para cualquier carrera que me citaran. Y me comentaron que este año no tenían presupuesto, me dijeron que era costoso llevarme desde Europa a carreras en América. Igualmente entiendo la situación y estaría más que orgullosa de poder vestir la Celeste y Blanca si se me da la oportunidad.
La talentosa ciclista mendocina busca mayor experiencia en Portugal, codeándose con los mejores entrenadores y equipos, y aprendiendo para poder volver fortalecida en sus cualidades deportivas.
Según contó estará hasta octubre, “para disfrutar la temporada de ruta completa con Maiatos”, agregó Benedetti, quien al finalizar no quiso dejar de agradecer “a toda mi familia, principalmente a mi mamá, mi papá y mi hermana que están en todo momento compartiendo conmigo y charlando constantemente. También, a mis amigos que aún estando lejos tomamos unos mates por videollamada; y a mi mentor del ciclismo, Gustavo Alaria, porque él me dijo que este sueño era posible y me enseñó a conseguirlo”.