Este seguramente no es el cumpleaños que más esperaba Carlitos Tevez. Estar concentrado, con sus compañeros, en una celebración bien futbolera con torta especial y demás.
Pero hoy, ya a los 37 años, sigue con el mismo profesionalismo de siempre y, aunque no hay partido a la vista, en la previa de un nuevo torneo, le toca este festejo a unos poquitos kilómetros de su su pareja Vanesa y sus tres hijos.
Y justamente porque no es el día en que pueden saludarlo en vivo y en directo (más allá de la videollamada) por estar guardado en medio de la pretemporada, es que los hijos de Carlitos decidieron hacerle un regalo especial. En pleno verano, Flor, Katie y Lito están estudiando de forma remota porque se rigen por el sistema americano del Lincoln. Y en uno de los breaks del colegio, se dedicaron a hacerle esta dedicatoria a la distancia a papá. El “feliz cumpleaños, papá” sonó fuerte en la casa de zona Norte, donde el año pasado el mismo Carlitos había hecho una fiesta de disfraces a todo trapo. Pero este 2021 es bien distinto, por la pandemia y porque Carlitos sufre por la salud de papá Segundo, que atraviesa una situación límite, muy compleja, que el propio 10 se encargó de explicar en la entrevista televisiva de la semana pasada.
Para Carlitos, Segundo es su ídolo y fanático de Boca con el que pudo celebrar el título de marzo 2020, el hombre que era pareja de la hermana de su mamá y que decidió adoptarlo como hijo. Tan ídolo como hoy es él para sus tres hijos, que son fanas de Boca como él y lo tienen ahí arriba. Son los tres que tuvo con Vanesa, su principal sostén, en las buenas y en las malas. Todos, familieros, disfrutaron de aquel casamiento impresionante en Carmelo, en diciembre de 2016. Y ahora se pusieron la 10 de Boca (esa que para Carlitos es tan importante y pesada por la historia) con el PAPÁ. Todos somos PAPÁ.
Florencia es la más grande, el 1° de abril cumple 16. Carlitos dice que es importante a la hora de las decisiones familiares, alguna vez le dijo por un live de Instagram que se fuera a dormir porque era tarde y contó que más allá de que es celoso, hasta se anima a preguntarle cosas de su vida. “Al principio me enteraba de última y no me gustaba nada, jaja. Después fui entendiendo más la situación, le daba la confianza a ella para que me contara. Se va de viaje y le digo ‘¿y, Flor, transaste?’ O peor todavía, le digo: ‘¿y, Flor, ¿mojaste la lengua, jaja’. Qué querés, y me dice: ‘Papá, no me digás así’. Se vuelve loca’”.
En esta producción para el cumple, los chicos también posaron con una sonrisa con murales viejos de su papá en un sector especial de la casa, con un denominador común: cada uno con la camiseta que tenía Carlitos cuando nacieron. Florencia con la del Corinthians, Katie (faltan días para sus 11 añitos, el 13/2) con la gigantografía del City. Y Lito Junior (cumple 7 años el 25), el hijo varón que tanto esperaba, con la de la Juve, señalando el chupete que su papá se ponía al festejar un gol contra el Milan. Con Lito pasa tiempo jugando al golf, su otra pasión. Un detalle: pese a que Tevez jugaba en el exterior, todos nacieron en la Argentina por decisión de sus papás.
Es un momento muy especial para Tevez, más allá de lo que pasa en Boca puertas adentro. Después de pasar tantas en Boca, de muchas tormentas, habiendo vivido de chico en el club donde de pibe jugaba con botines desgastados, hoy se abstrae de las polémicas y piensa en lo que se viene, Tiene muy claro dónde está parado. Ya son 37 años y una vida en el club. En un viernes de pilcha oficial, sus hijos quisieron darle esta sorpresa. Y su pareja Vanesa le encargó una torta para conmoverlo, de él con su papá. Este sábado se viene el festejo íntimo en familia, con los suyos. Con sus hijos, la banderas con la estrella 37 y las camisetas de cada uno. Y ese feliz cumple con abrazo para el Apapache.