La Reserva de Boca se consagró campeona, Gracias a la goleada 3-0 sobre Independiente en el Estadio Libertadores de América, el equipo de Mariano Herrón levantó el título de la categoría, tal como había sucedido el año pasado de la mano de Hugo Ibarra y Mauricio Serna.
Más allá del gran presente de su escolta Vélez, los pibes del Xeneize sabían que dependían de sí mismos para festejar en el torneo. Es por eso que saltaron a la cancha del Rojo con el cuchillo entre los dientes y asumieron el protagonismo desde el primer minuto.
El empuje y la jerarquía individual de Boca rápidamente se plasmó en el marcador: a los 13 minutos de la etapa inicial, Maximiliano Zalazar se escapó entre los defensores, se metió en el área y sacó un derechazo cruzado. Su intento fue tapado por el arquero Manuel Tasso, pero dio rebote y Federico Aguirre la mandó a la red.
Lejos de cuidar la ventaja mínima, el conjunto azul y oro fue por más y, pasado el cuarto de hora, llegó el segundo grito de la mañana en los pies de Zalazar, quien cambió por gol un penal que le cometieron a Julián Carrasco.
La Reserva de Boca tuvo un par de chances para convertir el triunfo en goleada, aunque ninguno de los delanteros pudo capitalizarlas. Sí lo hizo el defensor Lautaro Di Lollo con un potente cabezazo a poco para el cierre de la historia en Avellaneda. También tuvo las suyas Independiente, pero estrelló sus ilusiones en los guantes de Leandro Brey.
Los minutos pasaron, el Xeneize manejó los hilos del juego con el 3-0 a favor y esperó hasta el silbatazo final para gritar campeón. Gritos de euforia y sonrisas para los pibes de Herrón, que hasta hace un puñado de jornadas estaban batallando en la mitad de la tabla del torneo y ahora vuelven a pisar fuerte en la categoría.