En tiempos de empoderamiento femenino, Andrea Fabiana Landi representa el sentido de pertenencia de todos los lujaninos de pura cepa (del malbec, obvio) que por estas horas disfrutan de un momento único e inigualable. Hace dos años y medio, la actual presidenta de Luján Sport Club encabezaba un proceso de salvataje deportivo de una de las instituciones señeras de la Liga Mendocina de Fútbol. El objetivo era poner de pie a un club sumido en una crisis tal que había tocado fondo, pero que gracias al apoyo de su gente, volvió a caminar.
“Para mí y para toda la comisión directiva es un honor y una responsabilidad enormes estar al frente de la institución en el año del Centenario. Lo vivimos con mucho compromiso porque hace casi un año que venimos trabajando para que el club llegue de la mejor forma a cumplir sus primeros cien años”, comenta Andrea a Los Andes en el veredín que está detrás del arco que da a la pileta del club.
Y agrega: “Tal como lo venimos haciendo desde enero de 2020, pandemia de por medio, se ha trabajado a pulmón y con muchísimas dificultades. Aún así logramos un montón de cosas lindas en este último tiempo que hacen que Luján cumpla cien años de la mejor manera posible y como el club lo merece”.
A principios de 2020, el Jardín del Bajo se había transformado en un baldío desierto. Más que granate, el club se encontraba en alerta roja. Una pared sostenida por un palo de construcción, la escalera del sector de ingreso principal abandonada, la pileta olímpica convertida en un depósito de hojas, basura y aguas contaminadas, la tribuna del sector sur cerrada e inhabilitada porque estaba a punto de desmoronarse, las butacas de los bancos de suplentes destrozadas, estructuras totalmente herrumbradas, el campo de juego convertido en un potrero por la falta de agua, sin luz por la deuda y el único baño del estadio (el de la platea) inhabilitado.
Mediante un comunicado publicado en el Facebook del club, el ex presidente Iván Ponce daba un paso al costado y llamaba a elecciones. Todo era un caos. Andrea Landi, quien había sido presidenta del club entre julio de 2015 y febrero de 2017 (Walter Ibaceta tomó las riendas), era nombrada nuevamente mandamás.
“En ese momento afrontar el Federal B y fue muy difícil porque éramos una comisión bastante pequeña. Lo hicimos de la mejor manera, me retiré porque me cansé bastante. En 2017 me fui, asumió otra comisión y a principios de 2020 el club había quedado acéfalo y con un solo socio activo. Todos los que queríamos que el club continuara nos organizamos y nos autoconvocamos en este mismo lugar. Vinieron padres, hinchas y socios que habían dejado de pagar las cuotas. Con el aporte de empresarios y vecinos del departamento logramos sanearlo parcialmente. Se convocó a Asamblea Ordinaria para elegir autoridades y volví a asumir como presidenta de una comisión formada por gente joven y varias mujeres. Esa CD se va renovando año tras año y ahora, después de los festejos del Centenario, se va a convocar a la Asamblea. Yo estoy dispuesta a continuar”, dice.
Al mes y medio de haber asumido se decretó el cierre de actividades por la pandemia de sorpresa y el club volvió a llenarse de dificultades. “Nos robaron un montón de cosas: reflectores, tela, tanque de agua, sanitarios. Aún así, no nos detuvimos y logramos salir adelante. Nos reuníamos a distancia y gestionamos un subsidio nacional para clubes en obra con el que pudimos hacer el playón de futsal e incorporamos una nueva disciplina que está yendo muy bien”, aporta.
Entre las gestiones que se han realizado para festejar el siglo de vida, Landi cuenta que una de ellas es la concreción del convenio con las autoridades de la Municipalidad de Luján para la futura construcción del predio en un terreno que está a algunos metros del Jardín del Bajo. “Es el puntapié inicial del sueño, de ahí en más nos espera mucho trabajo para poder terminar de concretarlo”, considera.
Por último, y a modo de frutilla del postre, anuncia otra obra muy importante para la institución que está a orillas del Río Mendoza. “En los próximos días, nuestro estadio va a estar iluminado por completo con luces LED que aportará el municipio. Eso para nosotros es una alegría enorme, ya que nos permitirá jugar y entrenar de noche”, concluye Andrea Landi.