Mencionar “la Zurda” en el ambiente del deporte mendocino, de inmediato se viene una cancha, una pelota de handball y una camiseta de la UNCuyo a la cabeza. Otra opción no cabe. Señor lector, no estamos equivocados. La Zurda es sinónimo de balonamno mendocino y pasión. ¿De quién estamos hablando? De Ana Alonso, profesora de Educación Física y entrenadora de la U que a sus 15 años se abrazó a este deporte y lo convirtió en un estilo de vida. Su pasión. Su cuna. Su escuela. Su hogar. Su familia. Su rabajo. Sus Amigos. Su Familia. Su mundo mágico.
La Profe Zurda, coordinadora del balonmano femenino de la UNCuyo, lleva tres años al frente del proyecto de la Confederación Argentina de Handball, “Detectar Talentos de la Región Cuyo” y es la entrenadora de la Selección Argentina de Menores. Orgullo y bandera del deporte de la provincia de Mendoza. Entre mates, descanso y planificando la temporada 2025, cuyos entrenamientos arrancan la próxima semana, tuvo un hermoso encuentro con Los Andes y explicó el fenómeno del handball en su vida, en Mendoza y el país. Imperdible.
– ¿Cuándo arrancó tu amor por el balonmano? En qué momento de tu vida, decidiste tomarlo como un estilo de vida.
-Mi primer contacto con el handball fue en la escuela secundaria en el Magisterio. Se armó un equipo para participar en los Juegos Intercolegiales. Se acercó mi profesora Hebe Caballera, en la actualidad amiga y compañera y me invitó a sumarme al equipo de la UNCuyo. Empecé a jugar a los 15 años. En ese momento, no habían divisiones formativas en la provincia, por esa razón, arrancabas y ya jugabas en Primera División. En la actualidad, los clubes tienen una estructura de inferiores. Y jugué hasta los 47 años que me retiré por una serie de lesiones. Sin dudas, es mi deporte. Mi pasión. A los 20 años, cuando estudiaba el profesorado de Educación Física, empecé como monitora en el club y adquirí mis primeras herramientas como entrenadora. Un estilo de vida… el deporte, la actividad física y el handball.
-¿Qué te brindó el balonamno, más allá de una carrera deportiva?
- Además de mi carrera deportiva, el balonmano me dio herramientas para la vida, como ser responsable, cumplir, plantearme objetivos y metas para trabajar en ellos. Me dio mis amigos, un hogar donde siempre me sentí en mi casa, me ayudó a fortalecer mi autoestima y forjar mi personalidad. Sentirme más segura frente al mundo. Sentir, en mi interior que yo podía desempeñarme como jugadora y luego entrenadora.
-Tu club UNCuyo, Selección Mendocina, Selección Argentina.. qué otro objetivo te planteas. Sueños…
-Durante mi vida deportiva, me puse objetivos y sueños que por suerte y con trabajo constante pude ir concretando. Cuando tenía 20 años, estuve en la preselección Argentina como jugadora, aunque no quedé en el equipo final. Después, tuve el sueño de ir a España a estudiar y capacitarme como entrenadora y lo logré en el 2003 y 2005. Transcurrió el tiempo y logré estar en un cuerpo técnico de Selección Nacional en la categoría cadetas. Durante mucho tiempo, fui entrenadora de distintas categorías de la Selección Mendocina y en la UNCuyo estoy en las divisiones formativas, un gran desafío diario, donde puedo aportar a niños y jóvenes. Hace tres años, se cumplió otro gran anhelo. Ingresé al plan de detección de talentos que es a nivel Nacional. Un proyecto que se llama “Futuro 2028″ y me dio la posibilidad de dirigir la Selección Nacional de Menores, una especie de Sub 14. Y el plus, estar presente en los Juegos Olímpicos de París, viendo a los Gladiadores. Uno de los máximos sueños que cumplí. Mi próximo anhelo: viajar con un equipo de la UNCuyo y competir en unto Torneo en Europa. Ya estuvimos en Brasil y Uruguay, pero llegar al Viejo Continente sería lo máximo.
-¿Cuál es tu función actual en la UNCuyo en el Seleccionado de Mendoza?
-Dentro de mi club, mi motor, coordino la rama femenina, desde las más chiquitas hasta el promocional (maxibalonamno). Mi tarea es bajar el lineamiento pedagógico y coordinadar a los profes y preparadores físicos que están entrenando a las demás categorías. Estoy a cargo del equipo de cadete y juvenil femenino. En cuanto al Seleccionado Argentina, estoy encargada en la Región Cuyo, detectar talentos en las categorías menores y cadetes de ambas ramas (Sub 14 y Sub 16). Primeras categorías competitivas. La meta del programa es aumentar el nivel de la base para que con el correr de los años, el nivel del handball argentino crezca y los jugadores lleguen a la Selección Nacional con mayores fundamentos, preparación y calidad.
-Según tu experiencia como jugadora, entrenadora, fanática y apasionada, ¿cuál es la situación actual del handball en Mendoza?
-En los últimos 20 años, el balonmano de la provincia ha evolucionado de manera notable. En la actualidad, las categorías formativas o de base, son primordiales. Esto hace que los niveles de juego y perfeccionamiento se logren a edades más tempranas. Sin embargo, considero que debería acudirse a detectar los talentos en las escuelas primarias. La AMEBAL tiene que lograr algún tipo de proyecto para captar más niños y más clubes e insertarlos en los clubes. Ha mejorado, pero aún falta mucho. En 2024, con las profesoras Hebe Caballero y Julieta Citro, realizamos una capacitación que vinculó el Instituto Universitario de Educación Física, la Dirección General de Escuelas, la Regional Norte y Centro. Los docentes de escuelas primerias se acercaron a esa capacitación y pudimos brindarles herramientas para dar el balonmano en la escuela. Por ejemplo: cómo iniciar al niño o niña en el balonmano. Es clave este proceso. La AMEBAL debe mejor el nexo entre docentes de escuelas primeras y de los clubes, para lograr que más niños practiquen esta disciplina. A nivel Nacional, Mendoza tiene un gran nivel. En la Argentina, a través de la Confederación Argentina, se llevan a cabo Torneo Argentinos y Torneos Nacionales de clubes campeones. La provincia como selección y con susclubes, obtiene grandes resultados.
– Y en la Argentina…
-La Selección Argentina de Mayores está en un nivel más alto que el seleccionado Femenino, unos conocidos como Los Gladiadores, en este momento disputando el Mundial y la otra la Garra. A nivel masculino, Argentina y Brasil son las máxima potencias de América. Y un pasito más atrás viene Chile. En este momento, se vislumbra un recambio en el equipo Nacional. Muchos jugadores jóvenes. Es un equipo en transición. En cambio, Brasil, está en su mejor momento, acaba de clasificar a los octavos de final de la cita ecuménica. La clave: la mayoría de los jugadores argentinos juegan en distintas ligas de Europa. Y en Femenino, muchas jugadoras comenzaron a emigrar.
-Por qué cuesta tanto que los clubes de Mendoza apuesten por una disciplina como el balonmano, una de las pocas actividades que practican en las escuelas.
-Considero que el factor económico del país y la falta de una política deportiva desde el estado, influye en todos los deportes que no son populares y promocionados como el fútbol. Hoy, es muy difícil para el deportista del Interior, llegar al CENARD y estar en una concentración. El balonmano es uno de los deportes más fáciles de enseñar porque los niños, utilizan los patrones motores básicos que vienen de sus genes como arrojar, atrapar, lanzar una pelota.
“La Zurda”, sinómino de pasión y embajadora del deporte mendocino.