Después de mucha espera, trabajo y proyección, Bautista Amieva y Leandro Aveiro, finalmente pudieron alcanzar uno de sus grandes objetivos: realizar una gira Future del Pro Tour de beach volley del Circuito Mundial, en Europa.
En el Viejo Continente, la dupla tunuyanina dejó expuesto que es la mejor de todos los tiempos de Mendoza y ratificó el segundo lugar como dupla de la Selección Argentina.
Los mendocinos volvieron a demostrar un gran nivel y el excelente momento deportivo con tres títulos que lograron entre jugadores de gran experiencia y de mayor rose internacional. El binomio, para disputar el Future, sólo contó con el apoyo de la Municipalidad de Tunuyán y, el resto fue mucho esfuerzo personal.
Bauti y Leo, se impusieron desde la tercera a la quinta etapa: Ciro Marina (Italia); Leuven (Bélgica) y Eslovenia con finales a 3 sets en tie break. Con vistas a los próximos objetivos, los mendocinos ya trabajan de cara a la gira del circuito Sudamericano y también para los Juegos Odesur.
Desde hace un año, Amieva y Aveiro son dupla estables, aunque han alternado con otros jugadores de la Selección. Ambos fueron medallistas de bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud: Leo en 2014 y Bauti en 2018.
La gira y los resultados tuvieron una gran connotación, dado que fue uno de los mayores sueños de Carlos Amieva, quien fuese entrenador de ambos y máximo impulsor del voleibol playero en el Valle de Uco, quien falleció trágicamente en enero.
Para Bauti y Leo, participar de este Pro Tour significó un gran desafío en el que se enfrentaron a rivales de jerarquía, y donde también se plasmó aquel sueño de Carlitos; ratificar que el beach volley del Valle tiene con qué proyectarse. “Todo esto está logrado por él y hubiese sido lindo que este sueño, que era el suyo, lo hubiese podido disfrutar y ver”, expresó Bautista, hijo del recordado Carly, un entrenador fundamental en el voley del Valle de Uco.
-Sin dudas, un gran orgullo haber hecho podio en el Pro Tour en Europa.
-Bautista: Fue nuestra primer Pro Tour juntos con Leo y de cinco torneos pudimos salir campeones en tres, por lo tanto se pueden imaginar lo felices y orgullosos que estamos. La satisfacción que tenemos por esto, porque hace mucho que queríamos hacerlo. Estuvimos peleando muy mucho para poder jugar juntos y la verdad es una forma de pisar fuerte, esto sin ánimo de nada, como para que puedan observar y que se den cuenta un poco de nuestro juego.
-Sin dudas ha sido una gran experiencia y con grandes resultados.
-Sí, pero estuvimos peleando todo el año para tener el Centro en Tunuyán y todo eso. y pudimos lograr eso y ahora estos triunfos, son como las frutillas del postre. Nos deja tranquilo porque lo que estamos haciendo está dando sus frutos. Tuvimos resultados muy buenos. Se nos infla el pecho con todo lo que pudimos lograr en esta gira.
-Son títulos que les permite sumar puntos en el ranking.
-B: Sí, pero ahora hay que seguir metiéndole, continuar entrenando y teniendo la mayor cantidad de competencia posible. Ahora vienen las giras sudamericanas y también los Odesur. La idea es jugar la máxima cantidad de torneos y así poder seguir encontrando nuestro juego. Terminamos jugando muy bien, sólidos y tranquilos. Nos respetaban demasiado los rivales y la verdad que eso es muy lindo. La idea es seguir metiéndole, entrenando en Tunuyán y ver si podemos llegar a París (Juegos Olímpicos de 2024), que es donde está puesto el máximo objetivo.
-Leonardo, aunque no arrancaron muy bien que digamos.
-En la primera no le fue bien a los equipos argentinos. Veníamos de entrenar con 2 y 3 grados bajo 0 en Mendoza y nos encontramos con una ola de calor de 42 grados y 47 de sensación térmica. Era imposible jugar. No tuvimos tiempo para adaptarnos. En la segunda fecha con Bauti llegamos hasta semifinales, porque tuve una leve lesión en el cuadriceps. En Ciró Marina, Italia, hicimos un torneo increíble y salimos campeones.
-¿Con qué nivel de exigencia se encontraron?.
-L: En el último torneo en Italia había muy buen nivel, con jugadores de renombre y equipos muy competitivos, por lo cual significó una felicidad tremenda. Después pasamos a Leuben (Bélgica), donde tuvimos un torneo muy duro y pasamos a la final con Alemania, que venía de jugar el Mundial. Empezamos perdiendo y nos recuperamos en el segundo set y ganamos en el tie break 15/13. Pero el de Eslovenia fue el mejor que hicimos; por el lugar, la mística, la organización fue algo increíble. Todos los partidos los ganamos en tie break y los sacamos adelante con buen juego. En la final, dimos vuelta el tie break, porque tuvimos 2 match point en contra; lo ganamos 17/15.