Que el Club Deportivo Godoy Cruz Antonio Tomba atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida institucional, no es ninguna novedad. La trágica y reciente pérdida de su último gran ídolo, Santiago “Morro” García, forma parte de un cúmulo de situaciones negativas, tanto en lo deportivo como en lo extradeportivo que han conformado un año realmente nefasto, quizá el peor de los cien años que cumplirá el próximo 1 de junio.
Son tiempos oscuros, turbulentos, más que complicados. Por eso, lo que ayer surgió como un rumor no sorprendía ni extrañaba para nada. El trascendido indicaba que Sebastián Méndez analizaba dar un paso al costado de su cargo de entrenador de Godoy Cruz. Los motivos que se indicaban sonaban hasta lógicos: conmovido, dolido y ¿molesto? por cómo se sucedieron los acontecimientos previos a la muerte del “Morro” García (un jugador que él quería, pero que la dirigencia le ordenó no tener en cuenta), el Gallego no tardaría en dar el portazo.
El antecedente fresco de su renuncia en Gimnasia La Plata tras la muerte de Diego Maradona -en un gesto loable hacia la figura del Diez- le aportaban cierta veracidad a la hipótesis. Sin embargo, el murmullo que amagaba con transformarse en noticia con el correr de las horas, fue desmentido por el propio entrenador. También desde el club expresaron lo siguiente: “A raíz de los rumores que surgieron en estas últimas horas sobre la posible renuncia de Méndez, déjenme confirmarles que no son ciertos”, aclararon desde adentro de la institución.
El mensaje trajo alivio. Y no era para menos. Con el debut en la Liga Profesional de Fútbol a la vuelta de la esquina (Godoy Cruz jugará el próximo sábado a las 17.10, frente a Aldosivi en el estadio José María Minella de Mar del Plata), sumado a la conmoción que generó el suicidio de un ídolo y referente para del plantel profesional, la noticia del alejamiento de Méndez hubiese sido como echar un galón de combustible sobre el fuego. En consecuencia, Méndez le pondrá el pecho a este difícil momento del club.
Una aclaración necesaria
El suicidio de Santiago García resultó una puñalada en el medio del corazón de los hinchas de Godoy Cruz, quienes amaban al ídolo y se lo hicieron saber siempre. Un amor que se potenció desde el último sábado, cuando se enteraron de la desaparición física del ídolo. Como era de esperar, la gente no tardó en atacar al presidente del club, José Mansur.
Aunque entro de ese blanco elegido se produjo una confusión en la que quedó Agustín Manzur. Tras recibir mensajes con amenazas y agresiones, el joven volante del Expreso (también marginado) tuvo que aclarar en sus redes sociales que no lo une ningún parentesco con el titular del club. “No tengo nada que ver con el presidente José Mansur. El mismo apellido lo dice”, precisó Agustín, que luego remarcó que el suyo lleva “z”, mientras que el del presi se escribe con “s”. “Estoy igual o más dolido que ustedes por la pérdida de un compañero y amigo como el ‘Morro’”, agregó.