El lunes 10 de julio, Rosario González (32) llegó temprano a Aeroparque, casi 2 horas antes de su vuelo de regreso a Mendoza programado para las 18:15.
“Cuando voy al preembarque veo en el cartel que decía 20:15. Ya de ida me había pasado lo mismo, 3 horas de demora”, cuenta. Era solo el comienzo de una larga noche varada en un aeropuerto: “A las 20 el cartel cambió a 1:35, con una precisión sorprendente. Había gente enojadísima”.
Dice que “continuamente fueron cambiando la pantalla de información toda la noche, entonces nadie durmió. Y en ningún momento apareció algún empleado de la aerrolínea”. Finalmente, el vuelo salió rumbo a Mendoza a las 6 y media de la mañana. “No nos pagaron ni un café. Fue desastroso”, recuerda Rosario.
Tres días antes, el viernes 7 de julio, Leandro Soler (41) entró a la aeroestación Francisco Gabrielli junto a su esposa y sus dos hijos con toda la ilusión de subir por primera vez a sus pequeños a un avión para unas ansiadas vacaciones en Capital Federal. Pero el vuelo -que debía salir a las 20:45- mostraba el tan temido “Demorado” en las pantallas, con un horario estimado de despegue a las 22:15.
Al final, tras 5 horas de una amarga y tediosa espera, el avión despegó a las 0:30, “sin que nadie de la empresa nos explicara el por qué del atraso”, cuenta aún enojado.
Estas historias de esperas eternas en aeropuertos son solo dos de las muchas que se viven a diario debido a que las demoras en los vuelos se han hecho una costumbre.
En Mendoza, según datos brindados a Los Andes por Aeropuertos Argentina 2000 -la empresa concesionaria-, entre el 1 y el 17 de julio más de la mitad de los vuelos (54%) despegaron fuera de horario. Es decir que un pasajero tiene hoy más posibilidades de que su avión salga tarde de que lo haga en forma puntual.
En cuanto a los arribos a la provincia, la puntualidad tampoco es la regla aunque las cifras mejoran: el 34% aterrizaron en el aeropuerto provincial demorados.
Cabe aclarar que las aerolíneas consideran que un vuelo es “puntual” cuando opera dentro de un margen de más o menos 15 minutos de su horario programado.
En el informe de AA2000 figuran todos los arribos y partidas en el aeropuerto de Mendoza durante 17 días a 8 destinos nacionales: Aeroparque, Ezeiza, Córdoba, Rosario, Salta, Neuquén, Comodoro Rivadavia e Iguazú; y a 4 internacionales: Santiago de Chile, Lima, Río de Janeiro y San Pablo.
Del total de 801 vuelos, el 70% corresponden a solo dos destinos: Aeroparque y Santiago de Chile. Y en ambos hay similares porcentajes de demora en las partidas (53% y 52%, respectivamente), aunque en los arribos los vuelos que vienen de Chile ganan en puntualidad (ver infografía).
Llama la atención el caso de Lima, uno de los destinos que se “estrenaron” este año desde Mendoza: de los 10 vuelos analizados, 6 arribaron tarde desde Perú y 4 despegaron fuera de hora desde la provincia.
Lo mismo ocurre con los destinos brasileños: de 5 partidas a San Pablo, 4 fueron demoradas; y de 4 a Río de Janeiro, en 3 no se respetó el horario estipulado.
Una demora récord
Lo que no especifican los datos son las empresas aéreas que operaron cada vuelo, por lo que no es posible identificar cuáles son las más y menos puntuales.
Sin embargo, se puede observar que las demoras a la hora de abordar un avión en Mendoza son mayoría. Y en algunos casos excesivas.
En 17 días hubo 12 vuelos que tuvieron más de 6 horas de atraso. Por ejemplo, el 15 de julio uno hacia Santiago se demoró ¡11 horas!: debía salir a las 14:05 y despegó finalmente a la 1:05 de la madrugada del 16 de julio.
Ese avión ya venía atrasado desde Chile: debía llegar al aeropuerto de El Plumerillo a las 13:35 y lo hizo a las 22:02. Es decir, 8 horas 27 minutos más tarde.
El 11 de julio, en tanto, un vuelo a Aeroparque salió casi 8 horas tarde: estaba programado a las 9 de la mañana y despegó a las 16:48.
Pero el récord de demora lo tiene uno del 10 de julio: salió ¡12 horas y media! más tarde rumbo a Aeroparque: debía hacerlo a las 20:45 y despegó a las 9:17 del día siguiente. Es precisamente el avión que había traído a Rosario González a Mendoza con 12 horas de retraso.
