El futuro ministro de Hacienda de la provincia, Martín Kerchner, dialogó hoy con Radio Mitre Mendoza sobre la crisis financiera de Mendoza, el retraso en el pago de los haberes y cómo preparan el Presupuesto para el próximo año.
"Los números los estamos terminando de mirar. Juramos el 10, seguramente vamos a afinarlos dentro del Ministerio con los nuevos funcionarios", explicó.
Y agregó: "Está claro que salir de esta crisis fiscal no va a ser de un día para el otro", remarcó el designado por Alfredo Cornejo para supervisar los gastos y recursos económicos con los que cuenta la provincia.
Sobre el Presupuesto aseguró: “Estimamos que será un número que estará por encima de los $4.500 millones producto de que la recaudación que entra todos los meses y lo que sale supera los 300 o 400 millones de pesos por mes”.
"Los primeros días del Gobierno de Cornejo la prioridad va a estar en pagar los sueldos de noviembre. Si no hay una varita mágica o un regalo del cielo nosotros vamos a terminar pagando una gran parte. Después será resolver los aguinaldos y los sueldos de diciembre", sentenció el futuro titular de Economía.
Respecto a la ley de Avalúo e Impositiva y el posible aumentos en los impuestos, Kerhner explicó: “La provincia no resiste más presión fiscal. Pero en principio vamos a sostener esa presión actual hasta tanto podamos comenzar a disminuirla”.
“Si no da la caja para poder cumplir con cuestiones básicas como los sueldos. Sí vamos a empezar el proceso a partir de que se dicte la ley Impositiva y los primeros meses con modificaciones que tiendan a ser más viable para el Estado en el sentido de pensar qué sectores están más comprometidos y cuáles no”, declaró.
Sobre la actualización en las tarifas de los servicios de micros y energía, el funcionario expresó: “Obviamente que tendremos que encontrar alguna solución, pero la prioridad hoy pasa por defender a las cosas básicas del Estado. Creo que todas las empresas prestadoras de servicios tuvieron mucha paciencia, una gran paciencia de todos estos años”.
"Esperamos tener la continuidad por unos meses para que el salario de los estatales y el pago de proveedores se regularicen, y a partir de ahí hacer un acuerdo razonable para que esas tarifas se acomoden en el tiempo"
“Creo que llegó el momento de mirar para atrás y decir que los que fueron acompañando un proceso que terminó en una crisis, hoy les pedimos que tengan la misma paciencia que tuvieron durante esos seis o siete años”.