El buque argentino Tosna Star que se trasladaba en el Mar Caribe tras haber zarpado desde Puerto Príncipe, en Haití, fue asaltado el domino en la tarde por piratas que les robaron sus pertenencias y atacaron a los tripulantes que salvaron sus vidas casi de milagro. Uno de ellos contó toda la odisea a través de Facebook el miércoles.
"Buenas tardes, esto que estoy relatando no es una segunda parte de una película. Esto que les voy a contar nos pasó en vivo y en directo", comenzó a contar en Facebook el navegante argentino Claudio Omar Benítez.
Y luego continuó su relato: "Fuimos abordados por piratas de Haití en zona de fondeo siendo entre las 20 y 21 horas o sea durante la noche de este domingo pasado". Según informó Infobae, el tanque fondeado argentino Tosna Star trasladaba a 21 tripulantes luego de haber partido desde Buenos Aires el 20 de diciembre de 2019. Su regreso estaba estipulado para el mes de marzo.
Sin embargo, cuando comenzó la cuarentena obligatoria por la pandemia de coronavirus, las restricciones marítimas en los puertos nacionales impidieron que el buque pudiera regresar a su tierra natal y la embarcación debió resolver su situación con arribos a diferentes puertos de centroamérica.
El inédito suceso ocurrió durante el domingo cuando el buque, operado por la empresa Marítima Maruba, fue abordado por al menos 12 piratas en las costas de Haití y todos los tripulantes temieron por su vida.
"Nos abordaron, subieron por el escoben del ancla de popa del buque. Subieron agresivos, armados con machetes, tridentes y cuchillos", detalló Benitez en Facebook.
Pero el relato del marinero continuó aún más estremecedor: "Tomaron por sorpresa al marinero de guardia, aprovechando la oscuridad del momento, le ponen un machete en el estómago y le piden nerviosos en su idioma que les entregue el teléfono y todo lo que tenía en su poder en ese momento. Lo mismo hacen con otros marineros a quienes amedrentaron más haitianos armados".
Los piratas agredieron a tres tripulantes del buque, Emiliano Jarolin, Jonathan Villalba y Roberto Alegre. A uno de ellos le pusieron una faca en el estómago y le apoyaron un tridente en la cabeza.
"Comienzan a robar los cabos del barco. En ese momento un engrasador escucha ruidos y ve, para su sorpresa, que tienen a sus compañeros apuntándole con armas blancas. Corre dando la alarma y despertando a toda la tripulación que en un segundo salimos a cubierta a rescatar a nuestros compañeros", continuó detallando Benítez en su historia que parecía un guion de película.
Según el tripulante, la gran mayoría de sus compañeros se encontraban en el puente de la embarcación una vez que el engrasador dio la señal de alarma. Pero a diferencia de las películas, el único que faltaba era el propio capitán del buque, que se vio preso de un ataque de pánico y permaneció asustado dentro de su camarote.
Los piratas robaron objetos de la misma embarcación y también les robaron teléfonos celulares y pertenencias personales a la mayoría de los tripulantes argentinos. Afortunadamente no hubo víctimas ni heridos de gravedad.
"Ya los haitianos se habían lanzado al agua con los objetos robados, allí los esperaban botes. Ante esta situación el oficial toma la decisión de levantar el ancla y retirarnos de la zona de peligro", describió Benítez. Ese mismo oficial tuvo que hacerse cargo del buque ante la inacción del capitán, que permanecía encerrado.
Así, el propio narrador de la historia pidió a las autoridades del Gobierno argentino que les permitan regresar a su país para evitar situaciones similares en el futuro: "Nos afectó la cuarenta del virus y no podemos regresar a nuestro país, a nuestro hogar. Hoy nos visitan piratas, qué más nos tiene que pasar para poder volver a nuestro hogar sanos, Dios mio", reclamó.