El Súper Bailando 2019 terminó hace unas semanas y desde la producción ya preparan el certamen que comenzará en abril de este año.
Marina Calabró fue la primera que recibió la oferta de LaFlia y en Los Ángeles de la Mañana comentó lo siguiente: "Sí, me convocaron, no lo puedo creer. Me llamaron el 30 de diciembre y tenía un mensaje de Pato de LaFlia y pensé 'bueno, seguro me quiere invitar al programa de José María Listorti (Hay que ver)'. Y me dice '¿sabés para que te llamo, no?'. Le contestó que ni idea y me dice 'para el Bailando'. Hubiera sido la última opción, pero bueno, llegó la propuesta y siempre es halagador. Estoy proyectando el año y está bueno".
Igualmente Marina no se ve bailando en la pista: "seamos realistas, una cosa es no ser virtuosa y otra es estar enyesada y oxidada. No sería la primera pero tampoco tengo mucha gracia, ¿desde dónde la piloteo? No se me ocurre desde dónde".
Además, siguió dando su parecer sobre lo exigente que es el certamen: "a veces las escucho a las chicas que bailan decir 'agregamos un ensayo a las dos de la mañana y ya habíamos ensayado a las siete menos cuarto, y después a las dos y cuarto, y después ocho y cinco'. Ellas bailan bien y viven para eso, imaginate que yo me tengo que intentar en La Flia o en los estudios de Reina Reech. Y también tengo proyectos que tienen más que ver con lo mío, así que mucho no la veo".
Ya sobre el final y ente risas, se animó a bromear sobre como la puntuaría el jurado: "el otro día Pampito, panelista de Flor de Tarde, me dijo De Brito y Marcelo Polino son aliados, amigos y me van a defender; y me reenvía un mensaje de Ángel diciendo cosas horribles que va a poner uno, cero, menos uno. ¿Los amigos no están para esto? Pampita me va a destrozar, Flor Peña no creo porque tengo buena onda; pero no puedo confiar en nadie. Está lleno de enemigos ese lugar, es muy hostil".