Cuentan en el Valle de Uco que, en su cocina y mientras estaba en la búsqueda de las verdaderas raíces culinarias de nuestro país, Francis Mallman soñó con el mejor lugar del mundo para crear sus siete fuegos. Resultó que ese rincón estaba entre viñedos, en Tunuyán.
Así, hace muy poco tiempo, el afamado cocinero concretó su ilusión y Siete Fuegos es el novel espacio gastronómico en The Vines Resort & Spa.
La cita es para almorzar, cualquier día que se desee quitar el estrés y el calor que el fin de año trae consigo. Alejarse un poco de la vorágine urbana y adentrarse en el microclima de ese entorno al pie de los Andes, esos que no dejan de contornear nunca la vívida postal.
Nadie llega hasta allí desprevenido. Todos andan buscando algunos de los sabores que ya degustaron en el libro - denominado como el restó - y que acaso no se aventuraron a preparar.
El sitio es el indicado, ya que Parrilla, Chapa, Infiernillo, Horno de barro, rescoldo, Asador y Caldero, crepitan y queman y dejan escapar sus aromas para la mejor de las sinestesias que se dará sobre la mesa.
Hay un espacio interior, con cocina abierta, que no deja sentir encierros porque las montañas, que están allá lejos, se meten por las ventanas. No obstante hay quienes prefieren almorzar en el patio de fuegos, muy cerca de las llamas que ven nacer a los principales platos. El diestro y rápido quehacer de los chefs, que el propio Francis ha entrenado, y que responden las consultas de los comensales, abre un poco más el apetito.
Sobre la mesa
El Ojo de Bife 9 horas ($ 208) y el Infiernillo de Salmón ($ 118), están entre los platos más solicitados de una carta plagada de sabores rústicos. No obstante, el pollo al hilo ($ 178), es uno de los que más curiosidad despierta. La razón es el especial sistema con el que se cocina, que atrae la atención de más de uno: sobre el fuego directo y colgando durante varias horas. “Antes los atábamos con hilos, pero ahora ideamos estos elementos de metálicos para sujetarlos, comenta el chef ejecutivo Diego Salvador Irrera, mientras aviva las llamas.
Ensalada de peras envueltas en jamón crudo a la plancha con queso Azul ($ 85); Ensalada de hongos silvestres a la plancha con tomillo y tostada de ajo con cebolla ($ 92); Pizza con queso de cabra, jamón crudo y perejil ($ 111) o Empanadas mendocinas con ensalada verde ($ 98); algunas de las entradas.
Ananá grillé con bizcochuelo a la parrilla y granita de pomelo ($ 47); Pionono de dulce de leche y frutillas a la plancha con mascarpone ($ 67) y Frutas a la piedra en horno de barro con helado de crema ($ 53), para un cierre dulce y delicioso. Todo muy bien maridado con la seleccionada, entre las 200 etiquetas de la cava.
Almuerzos de martes a domingos, de 12 a 17. Ruta Provincial 94, km 11, Tunuyán, Mendoza. Tel.: 261 461 3910/
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Otro por Tupungato
Otra de las novedades en materia culinaria del Valle de Uco es El Nudo. Este restó, que inauguró hace muy poco, forma parte de un atractivo proyecto enoturístico en Gualtallary, Tupungato. Sobre la llamada Ruta del Vino (Ruta 89, kilómetro 11) y con un inmejorable paisaje de montaña y viñedos, se sitúa en una propiedad de 45 hectáreas y se completa con una bodega (en funcionamiento) y un hotel cuatro estrellas superior, en construcción.
La cocina está basada en elaboraciones simples y tradicionales y pone el acento en los sabores genuinos y los productos de estación y regionales. Calidad de la materia prima con la que cocinan y calidez de la gente de la zona, ya que son ellos quienes conforman el equipo de trabajo, son dos aspectos clave por allí. Todo con talante local, como el nombre del restó que simboliza ese tiempo de relevancia en el ciclo de la vid que sucede luego de la poda.
Con la carta en la mano, no es sencilla la elección porque los nombres son sugerentes y ya en los platos se descubren deliciosos. "Un aplauso para el asador" (combinación de carnes a las brasas) y "Asado de obra" (otra de las especialidades en asado), entre las carnes. También sirven platos que rinden tributo a la papa, el producto que más identifica a la zona: tortilla de papas al fuego de leña, papas fritas en disco dorado, papas en tres texturas y papas rústicas aromatizadas con hierbas frescas.
Para acompañar el menú de comidas y postres, el restaurante cuenta con una línea de vinos propia; expresión de las uvas de la finca. Aquí, cobran protagonismo el Chardonnay, Malbec, Cabernet Franc y un espumante elaborado con método tradicional, producto de uvas Chardonnay y Pinot Noir. Vale apuntar que ofrecen servicio de descorche.
"La preocupación permanente por brindar un servicio de excelente calidad que acompañe las elaboraciones gastronómicas es el objetivo principal de nuestro restaurante", comentó el sommelier mendocino, Claudio Laciar, manager del espacio gastronómico.
Cubierto promedio con bebida a partir de $ 90. Hay menú para niños y platos para vegetarianos. Reservas:
reservas@elnudorestaurant.com.ar
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/ 0261 – 154547223. Cocina abierta desde las 12 hasta 16, de martes a domingos.
