Sergio Massa y Diego Bossio sentenciaron que es invotable y las bancas de los diputados kirchneristas aparecieron ayer con carteles con la palabra "Rehacer".
Pero Marcos Peña rechazó la posibilidad de que el Gobierno reelabore el Presupuesto 2019 y señaló que el proyecto, negociado con los gobernadores, tiene "coherencia" y "los valores correctos para poder encarar el equilibrio fiscal" que necesita el país.
El jefe de Gabinete formuló estas declaraciones al responder preguntas de los diputados nacionales en el recinto de la Cámara baja, adonde concurrió para cumplir la obligación constitucional de brindar su informe mensual al Congreso sobre la marcha del Gobierno.
Cambiemos se propone emitir dictámenes de la comisión de Presupuesto y Hacienda el martes 16 de octubre y llevar el proyecto al recinto una semana después para que, con la eventual media sanción, pueda ser convalidado de inmediato en el Senado. Pero la oposición sigue poniendo reparos al texto: no cree en las pautas y critica con dureza el ajuste en todas las áreas.
"El Presupuesto es un dibujo, lo sabe usted, el ministro (de Hacienda, Nicolás Dujovne), no sólo porque lo acordaron con el Fondo Monetario Internacional (FMI), sino porque el año pasado nos hicieron votar también un presupuesto que decía que la inflación para este año iba a ser de 10%; a los pocos días cambiaron esa meta y la pusieron en 15%, y hoy se está hablando de que va a ser cerca del 45%", dijo el diputado kirchnerista Áxel Kicillof.
Además del kirchnerismo, también la líder de la bancada massista, Graciela Camaño, afirmó que este presupuesto es "invotable" y que propone "estanflación".
"Vamos a tener más aumentos de tarifas, mucha inflación, porque como venimos de casi un 40% y no sabemos con cuánto vamos a terminar en diciembre creemos que un veintipico o treinta es aceptable. Miraba la inflación de Perú de este año y se me caían las babas de la envidia. Vamos a tener más impuestos, porque al déficit cero se llega con las retenciones de todos, sin ganadores ni perdedores. Vamos a tener menos obra pública (...) vamos a pagar mucho en intereses de la deuda y vamos a contraer el consumo interno", dijo Camaño.
El ministro coordinador destacó en la sesión especial de ayer el "ejercicio muy positivo de acuerdo político" con los gobernadores para la elaboración del Presupuesto y señaló que es un cálculo "austero" pero tiene "prioridades claras" ya que, por ejemplo, "el gasto social representa el 77% del gasto primario".
En el cierre, el jefe del interbloque Cambiemos, Mario Negri, defendió al Gobierno de las críticas del kirchnerismo: "En 2014 vinieron con un Presupuesto proyectado del 9% de inflación y se fueron con el 38%. Tendríamos que haberles prendido fuego nosotros a ustedes. Muchachos, gobernaban ustedes, no nosotros en ese momento. Ojalá no se vuelva a repetir en la Argentina. Tengamos un poquito de memoria. En 2014 proyectaban un dólar de 6 pesos y en la calle se vendía a 14 pesos", aseveró, y sostuvo que "pedir que devuelvan el Presupuesto es poco serio".
Exposición diferente
A diferencia de las anteriores ocasiones, en que justamente había puesto énfasis en el crecimiento económico, esta vez Peña optó por destacar los "avances y desafíos en materia de seguridad, lucha contra el narcotráfico y fortalecimiento de la justicia". No consideró conveniente brindar un mensaje de corte económico en plena negociación del Presupuesto y en el medio de la crisis.
Peña reapareció ayer en el Congreso después de algunas semanas en silencio e inusual bajo perfil como consecuencia de la crisis económica y de que la dirigencia política y empresarial pidió abiertamente su renuncia.
La última vez que Peña fue al Parlamento a brindar su informe fue el 1º de agosto, a la Cámara de Diputados. Ese día el dólar estadounidense estaba en 28,22 pesos para la venta. Ayer cotizaba a 38,76 pesos, después de haber superado los 42 pesos.