Sergio Marclay, ex Gimnasia, dialogó de forma exclusiva con el medio partidario de Argentino de Quilmes El Mate de Cristal y refirió al golpazo que asustó a todos: “Fue un momento desesperante, porque no podía respirar y me dio temor; el golpe fue en la costilla flotante y un momento difícil. Pero por suerte ya estamos mejor, recuperándome, gracias a Dios no hubo fisura ni tampoco lesión de gravedad”.
El goleador le agradeció “a todos por preocuparse, a los profesionales que me brindaron su pronta atención, y a la comisión, cuerpo técnico, compañeros, amigos y a mi familia que se preocupo mucho y me banca permanentemente y a ustedes por permitirme llevarle tranquilidad a todos los hinchas de Argentino de Quilmes”.