¿Habrá imaginado cuando empezó su carrera que el legado también iba a tener perfume de mujer? Seguramente que no. Pero la vida le ha dado su mejor jugada a Marcelo Perruzzi, sanrafaelino por nacimiento y adoptado por esta ciudad desde hace 25 años.
Aquellas corridas y goles en su Huracán amado lo llevaron a sobresalir y pasar por varios clubes.
Y un día se quedó, cerró las valijas y formó su familia. Se casó con Ines y llegaron Francisco, Juan Cruz e Ignacio. Los herederos no dudaron y eligieron el camino de papá: ser futbolistas. No podía ser de otra manera. La Academia Chacras los cobijó y fue el club elegido por los tres, hasta que Francisco decidió buscar otro camino en San Lorenzo.
Pero la historia tiene un capítulo más que particular, porque la mujer de siempre, la que lo acompañó en cada momento, también se inclinó por el deporte. Y hoy se reparte entre las labores de casa, el trabajo, el hockey y el fútbol. Sí. También se divierte con la redonda.
Sin dudas que pisar el hogar de los Perruzzi es respirar fútbol...
-Si te decían que tus tres hijos iban a ser futbolistas, ¿lo creías?
-No. Y hoy no lo puedo creer. Pero igual lo que más quería es que practicaran algún deporte, a los tres les gustó el fútbol porque lo han mamado en casa todo el tiempo. Y por ahora juegan...
-¿Y cómo vivís esta experiencia?
-Muy tranquilo, les hablo muy poco. Obvio que conversamos de fútbol, pero poco de ellos, sólo cuando me preguntan para corregir algo. Yo soy más papá que entrenador para los tres.
-¿Te gustó la elección que hicieron?
-Sí, me encantó porque es un lugar de crecimiento como cualquier deporte, pero uno que está con el fútbol, como papá me pone muy contento. Es un espacio donde empezás a sociabilizarte. Me hace feliz que practiquen el deporte que hice toda mi vida.
Marcelo, Coordinador Juvenil de Acadamia Chacras, cuenta con una colaboradora de lujo, y es que Ines ya curtida con el fútbol hasta se le anima a marcarle cosas frente al televisor.
“Es futbolista y jugadora de hockey. Más no me puede golpear la vida (risas), habla de táctica, de cómo se tienen que parar los jugadores… Me ha superado. Aprendió, pero no le hago caso. La verdad es que está feliz con lo que hace y nos gusta que ella haga un deporte y disfrute. Ahora entiende cuando un jugador se amarga y se pone triste”, cuenta el hoy entrenador.
Y sí. El legado superó a Pancho, Coco y Nacho.
Ines escucha y asiente, sabe cómo moverse en el terreno de los futbolistas. Y Marcelo sigue hablando de ellos
-Conoces muy bien el ambiente del fútbol. ¿Le explicás que no todo es éxito?.
-Sí, la verdad es que hablo más de las cosas feas del fútbol que de las lindas. Como todo futbolista, la carrera tiene muchos vaivenes. El fútbol muchas veces tarda en reconocerte, en que encuentres un lugar y a veces no lo conseguís nunca.
Siempre les dijo que hay que ser muy cuidadoso, entrenar mucho y a veces el fútbol te la oportunidad de que lo utilices como un medio de vida, o en otras ocasiones sólo para practicarlo.
-No todos llegan a jugar en primera.
-Es así. Sólo el 2% de los futbolistas del mundo se convierten en profesionales. Sacando esa cuenta, ellos tendrían que entrar en ese porcentaje y realmente es muy difícil. Hoy como entrenador uno vive trabajando para ese 98% que lucha por sus sueños y por llegar, a veces se consigue y a veces no.
-¿Qué esperas de ellos?
-Que sean buenas personas, nada más. Buenos tipos y que estudien. Quiero que cosechen muchos amigos, porque es lindo que cuando dejás de jugar te siga llamando la gente que compartió el fútbol con vos. Y si el fútbol los premia, bienvenido y que lo disfruten.
-¿Te hubiese gustado que alguno te viera jugar?
-Sí, me hubiese encantado. Se iban a enojar por los insultos, seguro habrían discutido en la tribuna.
-¿Por qué te quedaste en la ciudad, siendo un hombre de San Rafael?
-Acá encontré trabajo, me llené de amigos y es un lugar muy lindo para crecer profesionalmente. Extraño mucho San Rafael, mi lugar, Huracán, su gente, pero me hice acá y llevo más de 22 años. Estoy muy bien.
Ping pong
Un técnico
“Yo tuve técnicos importantes: Juan Echecopar en Patronato, Raúl Tamagnone en San Martín me marcó, confiaba mucho en mí, Pompeo Tardivo en San Martín de San Juan fue una persona que me educó tácticamente, y el DT que me hizo debutar en Huracán, José Imberno (fallecido) que creyó en mí”.
El gol más recordado
“El primer gol que hice en mi vida en Huracán de San Rafael, contra Constitución, a los 15 años. Llevaba tres partidos al banco y al cuarto me ponen faltando 15 minutos, empatábamos uno a uno y convertí el gol del triunfo. Fue un golazo de afuera del área, impensado, creo que nunca más hice un gol así. A la otra fecha también entré, hice un gol y salimos campeones. Un sueño”.
El mejor equipo
“Integré muchos buenos equipos. El Huracán de San Rafael que jugó el Argentino A en el año 95, fue tremendo, un gran equipo formado con casi todos los jugadores del medio, con mucho hambre para hacer trascender a Huracán, San Martín campeón del 94 era un equipazo, y el Chacras de Coria con el que ascendimos al Argentino A”.
Así los ve a ellos
Bajo la atenta mirada del padre- técnico
Francisco (7° División San Lorenzo): "Es el más aguerrido, un jugador muy táctico, ordenado para marcar y le gusta el roce".
Coco (Cuarta y Primera, cat 98 Academia Chacras: "Es un jugador muy bien dotado técnicamente, juega bien, simple y es inteligente".
Nacho (Cat 2005 Academia Chacras): "Yo le digo que es el diferente, el más habilidoso. Recupera y pasa bien la pelota, está medio loco (risas) por ahí y tenemos que calmarlo".
Un anécdota inolvidable
“La mejor anécdota de mi vida fue en Newell’s, cuando yo recién había llegado tras una prueba. Compartía la pensión con Jorge Carrizo (sanrafaelino), Gabriel Batistuta y Fernando Gamboa. Estos dos llevaban pocos partidos en primera y aparecieron por la habitación descorchando champagne porque habían firmado el primer contrato. Es más, Gamboa le avisó a todos que dejaba dinero en la pieza y si faltaba algo sabría quién era. Festejaron e hicieron un desastre, hasta que vino Jorge Griffa y puso las cosas en órdenes: ‘Acá es sagrado, no se ensucia’, dijo. Yo era un pibe, miraba asombrado y no lo podía creer”.
"Le dije Que disfrute al máximo"
Desde hace un año y medio Francisco juega en la séptima de San Lorenzo, y Marcelo está feliz por su momento. “Nos pone muy feliz que él luche por su sueño. Le dije que disfrute, porque es un privilegiado”.
Inés Ambrosini, esposa de Marcelo: "Voy al arco y a veces juego de cinco"
“La verdad es que vivo rodeada de fútbol, es parte de mi vida. Ya soy uno más, así me tratan ellos. Todo es fútbol en casa, automáticamente pongo deportes en el televisor. Yo agradezco a Marcelo la pasión que le transmitió a los chicos y a toda la familia. Qué bien habrá hecho las cosas, que los hizo a imagen y semejanza de él. Me hizo muy fácil la crianza estando en el deporte. Era genial ser la mujer de un futbolista, yo no lo esperaba y aprendí a acompañar desde otro lugar, se sufría mucho y los fines de semana eran distintos. Todo se magnificaba, un triunfo hacía la semana muy feliz y la derrota más complicada. Ellos hoy intentan enseñarme todo y hago lo que puedo. Voy al arco y a veces también juego de cinco”.