Cada millón de dólares exportado en maquinaria agrícola y agropartes equivale a 60 puestos de trabajo directo e indirecto. Por este motivo, los especialistas del INTA destacan la importancia estratégica del sector.
Es que las inversiones en el mercado local de máquinas agrícolas ascenderán, a finales de este año, a más de 1.650 millones de dólares, un 14% más respecto al año pasado.
De acuerdo con Mario Bragachini -coordinador del programa “Procesos tecnológicos para agregar valor en origen en forma sustentable” del IN TA Manfredi, Córdoba-, “las nuevas reglas que rigen las exportaciones agropecuarias mejoraron la rentabilidad del trigo, maíz, soja y algunos cultivos regionales. Esto, a su vez, impulsa una mayor demanda local de máquinas y agropartes de agricultura de precisión”.
“En consecuencia, las inversiones en el mercado local de máquinas agrícolas ascenderán, para finales de este año, a más de 1.650 millones de dólares, un 14 % más respecto al año pasado. Entre estas se destacan las sembradoras”, puntualizó el técnico del INTA.
En referencia al impacto social de este incremento, Bragachini destacó su “importancia estratégica” y detalló que “nuestro país actualmente exporta más del 20% de la facturación local, lo que equivale a 12 mil puestos de trabajo directo e indirecto”.
Y aseguró que “se trabaja fuerte para incentivar la competitividad de este sector en el mercado global y local” ya que se estima que por cada millón de dólares exportado como maquinaria agrícola se generan 60 puestos de trabajo.
En línea con el informe del Indec, la venta de máquinas agrícolas en el país durante el segundo trimestre de 2016 alcanzó una facturación de 4.281,6 millones de pesos, lo que representa, en relación al mismo trimestre de 2015, un aumento del 76,8%.
Los tractores y cosechadoras presentan los niveles de facturación más altos del trimestre con 1.672,4 y 1.039,4 millones de pesos, respectivamente.
En cuanto a las ventas, el informe indica que las sembradoras y tractores presentan incrementos de 111,5 % y 100 %, respectivamente, mientras que las cosechadoras registraron una suba de un 60,4% y los implementos aumentaron un 47,8%.
Argentina, hacia el mundo
“El mercado de máquinas agrícolas está en pleno crecimiento en materia de demanda de tecnología y calidad”, aseguró Bragachini quien detalló que la Argentina es el segundo país del mundo en adopción de agricultura de precisión, después de Estados Unidos, y el primero de Latinoamérica en desarrollo, fabricación y adopción.
Existen más de 20 empresas nacionales de escala internacional que producen electrónica y software para transformar a las máquinas agrícolas argentinas en inteligentes, autoguiadas, autoregulables e híper conectadas.
“Esto nos permite adquirir competitividad global para satisfacer la exigente demanda del mercado interno y externo”, indicó Bragachini.
Entre los principales destinos, el especialista destacó Bolivia, Uruguay, Sudáfrica, Kazakstán, Venezuela, Brasil, Italia, Rusia, Paraguay, Ucrania, Guatemala, Australia, Estados Unidos, México, Perú, Chile, Mozambique, Namibia y Rumania.