Manuel Montero es uno de los tres jugadores, en la lista de 25 que iniciaron la gira por Nueva Zelanda.
Su caso es particular: Pantera se rompió ligamento cruzado anterior y menisco externo de la rodilla derecha durante un entrenamiento con Los Pumas preparatorio para el Rugby Championship. Su último partido fue el 16 de mayo ante Uruguay por el Sudamericano. No pudo jugar el certamen de selecciones del Hemisferio Sur y tampoco el Mundial.
“Me emociona mucho después de todo lo que me tocó perderme”, cuenta el back de 24 años. Su recuperación fue dentro de los parámetros esperados: a fin de año le contó a Scrum que esperaba estar listo para fines de marzo. “Siento algunas cositas pero es cuestión de sacarme el miedo totalmente. Me siento bien”, explica en la actualidad.
-¿Cómo estás viendo el torneo desde afuera?
-Los partidos son muy duros, los equipos son físicamente muy fuertes, no tenés partidos que sean tranquilos.
-¿Cómo viste a Jaguares?
-Está bueno que nos animemos a jugar, ojalá que sigamos manteniendo este juego tan dinámico. Siempre falta un poquito pero el equipo está muy bien. Recién estamos empezando.
Las tres derrotas de la franquicia argentina fueron ajustadas y Pantera es optimista: “Tenemos que tratar de demostrar lo que jugamos, con estos partidos te quedás con bronca. Estuvieron ahí nomás en todos los que perdieron”.
Nuevamente convocado, y entre los titulares, el potente wing de 1,94 metros plantea su objetivo: “personalmente me gustaría sumar minutos y tratar de volver a afianzarme en el equipo”.
Penúltima práctica del equipo
En lo que fue la penúltima práctica de los Jaguares antes del encuentro ante Blues, en la madrugada del sábado, el plantel realizó algunos movimientos puntuales de ajustes, pero por sobre todo los jugadores intentan ambientarse a las 16 horas de diferencia que hay entre Argentina y Nueva Zelanda.
Sin lesionados ni golpeados, el equipo titular en el que está el mendocino Rodrigo Báez se movió pensando en el rival, el primero de una serie de cuatro partidos como visitantes, tres en tierras maoríes y uno en Japón.
Recién a fines de abril, la franquicia argentina volverá a jugar en condición de local.
Lavanini, el elegido
El segunda línea argentino, quedó entre los mejores del Súper Rugby hasta ahora. Lavanini es el único argentino elegido.