Aerosol en mano, Manu Ginóbili se agachó para dejarle una marca imborrable a una plaza del barrio porteño de Saavedra. Rodeado de curiosos, el mejor basquetbolista argentino de la historia se acercó para conocer la cancha de básquet de La Copita que ahora lleva su imagen en el piso y también su autógrafo.
La vista aérea del mural es impresionante. De un piso azul, emerge un Manu Ginóbili gigante con la camiseta número 20 de los Spurs y con un pulgar en alto.
Este viernes, cuando las primeras imágenes de la remodelación de la cancha se daban a conocer, Ginóbili sorprendió al presentarse allí para conocerla. No estuvo solo: según trascendió por unas fotos, lo acompañaron sus tres hijos.
El bahiense, entonces, puso su firma con un aerosol blanco y luego grabó una campaña publicitaria, de la que no se conocieron mayores detalles. Antes de irse, según publicó el sitio Saavedra Online, saludó a algunos vecinos.