Sabido es que “Mansión imposible” fue uno de los mayores éxitos de la última temporada en Carlos Paz. ¿Por qué?, basta ceñirse a los datos formales para aventurar la respuesta.
Es que detrás de esta puesta encontramos la eficaz mirada de Carlos Olivieri, uno de los directores más experimentados del circuito comercial (“Sé infiel y nos mires con quién”, un suceso en Mar del Plata); y la pluma de Sergio Marcos y Martín Guerra, una dupla ‘ducha’ en comedias de este tipo (“Viaje de locura”, también protagonizada por Alfonso y Chaves).
Pero todo se completa con un elenco muy bien ecualizado: Emilio Disi (experto actor de comedias), Peter Alfonso (quien empieza a profundizar su incursión en la actuación), Fredy Villareal, Diego Pérez (en reemplazo de Mariano Iúdica), Iliana Calabró, Virginia Gallardo, Floppy Tesouro y Mónica Fleiderman (cuatro mujeres de curvas peligrosas).
Un dato más: la canción original -homónima- lleva el sello incomparable de Los Decadentes.
-La obra funciona, quedó demostradísimo. ¿Cuál es la clave?
-El gran elenco que tiene es fundamental. Pero además, la comedia tiene buen ritmo: no para en ningún momento, logra que no puedas moverte de la silla; y tiene la particularidad de tener efectos visuales (explosiones, trucos de magia), algo que sale de las típicas comedias y que funciona muy bien, porque es sorpresivo.
-Es difícil hablar del éxito de la obra y esquivar los escándalos que lo rodearon. Sin embargo, vos y Paula se mantuvieron ajenos. ¿Es posible estar en el ojo del huracán y no ser arrastrado?
-No nos gusta, le escapamos; y no es una estrategia, es una forma de vida porque en ese aspecto somos parecidos, preferimos estar tranquilos. Uno no puede caerle bien a todo el mundo pero sé que estoy expuesto y acepto lo que viene. Claro que a veces hay agresiones sin sentido que te pueden herir o enojar. En esos casos es difícil no meterse pero trato de evitarlo. Específicamente relacionado con la obra, hay que saber discernir que muchas críticas son dichas para generar polémica.
Divertidos efectos especiales y un sinfín de equívocos, enmarcan una original y vertiginosa comedia en la que se entrecruzan el humor y las sorpresas hasta llegar a un inesperado final, donde los personajes juegan todas sus cartas para definir su suerte.