Jorge Mangeri
procesado por el homicidio de
Angeles Rawson
declarará mañana a pedido de la fiscalía y de la querella por el delito de "homicidio doblemente calificado, criminis causa y por femicidio". indicaron fuentes judiciales.
Además, la Cámara del Crimen porteña rechazó las nulidades pedidas por su defensa, entre ellas la contaminación del ADN, y dejó al acusado ahora a las puertas de una nueva indagatoria por delitos más graves.
El juez de instrucción Javier Ríos tomó la decisión de convocar a la nueva indagatoria luego de ser informado de la resolución de sus superiores de la Sala VI de la Cámara.
Estas dos diligencias son una consecuencia directa de lo que sucedió en tribunales el 6 de noviembre: ese día los camaristas escucharon los argumentos de la defensa del portero para intentar anular las pericias de ADN que comprometen severamente al acusado, pero además hubo una junta médica que determinó que la menor murió asfixiada cuando se resistía a un ataque sexual.
Angeles, de 16 años, desapareció el 10 de junio pasado cuando regresaba de una clase de gimnasia hasta su casa, en Ravignani 2360 de Palermo. Su cadáver apareció al día siguiente en el predio de la Ceamse de José León Suárez y, aunque las sospechas apuntaban a la familia de la víctima, el viernes 15 de junio quedó detenido el portero del edificio por decir en medio de una testimonial: "Fui yo".
Las sospechas de la fiscal Paula Asaro se confirmaron cuando los peritos encontraron bajo las uñas de una de las manos de Angeles rastros de ADN de Mangeri, cuya defensa intenta ahora anular esos resultados.
Los abogados de Mangeri intentaron descalificar la pericia elaborada por el Cuerpo Médico Forense, al sostener que se había vulnerado el debido proceso y el derecho de defensa por la forma en que había sido hecho el análisis, y argumentando que pudo haber ocurrido una contaminación de la prueba. Los argumentos, sin embargo, no sirvieron para conmover a los camaristas, que ratificaron la validez de las pruebas.
Con estos resultados, el juez decidió hacer lugar al planteo de la querella del papa de Angeles, Franklin Rawson, y de la fiscalía para que se agrave la situación procesal de Mangeri. Ríos había procesado a Mangeri por homicidio agravado por alevosía, pero la defensa interpretó que si la victima había tratado de defenderse no había habido un obrar sobre seguro y por lo tanto cabía el agravante de alevosía.
Así lo entendió también la Cámara del Crimen, que dejó en pie el procesamiento por homicidio simple, aunque estaban pendientes los resultados de la junta médica confirmando la hipótesis en torno a que la menor se resistió a un abuso y por eso dejó marcas en el cuerpo del atacante y también bajo sus uñas.
La defensa se había entusiasmado al enterarse de que los expertos no encontraron ADN del imputado en la "repericia". No obstante, remarcaron las fuentes, esa situación no invalidaba los primeros resultados genéticos que determinaron que debajo de tres uñas de la mano derecha deAngeles había ADN del encargado.