Con diversos actos en todo el país fueron recordados hoy a los 323 tripulantes del ARA Crucero General Belgrano que fallecieron en el ataque de un submarino nuclear británico al buque hace 37 años en el Atlántico sur, durante la guerra de Malvinas, cuya soberanía sigue bajo reclamo de Argentina.
El gobierno, a través del secretario de Derechos Humanos Claudio Avruj, expresó su reconocimiento a los héroes argentinos que fallecieron en el ataque perpetrado por el submarino Conqueror.
"A 37 años del hundimiento del Crucero ARA General Belgrano, quiero rendir un sentido homenaje a nuestros héroes que murieron defendiendo la patria durante la Guerra de Malvinas. Mi abrazo afectuoso a sus familiares que ya no están solos", expresó el funcionario en su cuenta de Twitter.
En tanto desde la secretaría que encabeza continúan las conversaciones con la Armada Argentina para la realización de un viaje de familiares a la zona del hundimiento, que podría realizarse entre los meses de octubre y noviembre, a bordo del rompehielos Almirante Irízar, confirmaron fuentes oficiales.
"Los viajes serán en respuesta al pedido que los familiares de caídos en la guerra de Malvinas le hicieron al presidente Mauricio Macri", contó Avruj a Télam el 2 de abril.
Desde la Comisión de Familiares de Caídos en Malvinas, su vicepresidente Marcelo Lobos -hermano del soldado Julio César Lobos quien murió en el crucero- dijo a Télam que "hay 323 familias queestán esperando poder hacer el duelo en el emblemático lugar del hundimiento que constituye la tumba de nuestros seres queridos".
"Queremos llegar con la mayor cantidad de familiares posibles. Sabemos que no es fácil pero tenemos la buena predisposición del gobierno y las fuerzas armadas", añadió.
Con la presencia de veteranos de guerra y familiares de los muertos en el Crucero, uno de los actos se realizó en el edificio Libertad, sede de la Armada Argentina, y luego una misa en la capilla Stella Maris. A su vez el subjefe del Estado Mayor General de la Armada, vicealmirante Eduardo Fondeville Sancet, encabezó otro acto en la base naval de Puerto Belgrano.
El único orador fue el Comandante de División de Destructores, capitán de navío Osvaldo Pablo Sassia, quien sostuvo que "si bien el relato histórico es conocido, su revisión hace que año tras año se acreciente nuestra admiración y respeto por esa dotación de 1.093 tripulantes, que en la hora decisiva hizo lo que tenía que hacer, mostrando ante la tragedia profesionalismo, valor, coraje, entrega, solidaridad y hombría de bien".
Sassia agregó además que "el ejemplo dado por éstos héroes nos habla de entrega, sacrificio, patria e ideales y nos marca una ruta y un destino, que nos compromete a poner nuestro mayor esfuerzo en construir una Armada y un país mejor".
Al hablarle a los veteranos del crucero General Belgrano, Sassia dijo: "Todos ustedes se han hecho acreedores de nuestro más sincero reconocimiento, ya que son un ejemplo trascendente y significativo de la lealtad, espíritu, subordinación y sacrificio que deben tener los hombres de armas, siendo el mayor legado que nos dejan y que debe constituir la columna vertebral de nuestra institución".
Al dirigirse a los familiares de la tripulación, el marino expresó el agradecimiento y respeto porque "sabemos que la pérdida de sus seres queridos genera una dolorosa ausencia imposible de llenar. Ellos permanecerán en el recuerdo de todos nosotros y de las generaciones venideras".
Por otra parte, se celebró una misa en la Catedral metropolitana en recuerdo de los 323 tripulantes que murieron en el hundimiento del crucero que llevaba un total de 1093 hombres y mujeres a bordo.
El crucero fue hundido por el submarino nuclear británico HMC Conqueror lo que causó la muerte de 323 tripulantes, prácticamente la mitad de las bajas en todo el conflicto que enfrentó a la Argentina con el Reino Unido en 1982.
“Yo tenía 18 años y estaba embarazada”
Los homenajes se realizaron en la Base Naval de Puerto Belgrano, ubicada a 30 kilómetros de Bahía Blanca, donde entre otros se encontraba Omar Sardén, integrante de la última tripulación del crucero, quien se desempeñaba como marinero y maquinista.
"Es un día muy especial para nosotros, tengo la suerte de estar acá en Puerto Belgrano", señaló a Télam al indicar que "siempre nosotros les hacemos el recuerdo y homenaje".
"Es fuerte esto y es como hoy me dijo un amigo: feliz cumpleaños, porque es un nacimiento para mí", expresó el hombre quien reside en Capital Federal.
Por su parte Olga Suárez, esposa del suboficial segundo de artilleros, Juan Alberto Gómez, expresó que "son muchas sensaciones y el dolor no se acaba nunca".
"Yo tenía 18 años y estaba embarazada de cuatro meses", expresó la mujer al recordar su vida hace 37 años cuando ocurrió el ataque inglés al ARA General Belgrano.
"Estoy acá por mis nietos y él (su esposo) desde un lugar en el mar nos da fuerza a la familia", agregó emocionada.