Las imágenes se extendieron por todo Estados Unidos: un cachorro triste, con el hocico y la garganta rosa como si hubiera sufrido una erupción en la piel.
Su nombre era Dani, dijo la semana pasada el sheriff del condado de Butler, en Ohio. Una ciudadana preocupada la había encontrado abandonada a un lado de la carretera el 17 de agosto, dijo. El hocico estaba cerrado con cinta adhesiva y su garganta abierta. Esta persona llevó corriendo al perro al veterinario para salvarlo, ganándose los corazones de los amantes de los animales a lo largo de la nación.
El veterinario descubrió un chip en el animal que decía que venía de Hart Rescue, en Cincinnate – y pronto llegaron las consultas a la oficina del sheriff para saber cómo podían ayudarlo.
"¿Cómo puedo donar para el cuidado y la recuperación de este pobre y dulce bebé?", escribió una persona en una publicación de Facebook.
"Me encantaría darle a este cachorro un hogar. ¿Puedo postularme?", preguntó otro.
El sheriff del condado de Buttler, Richard K. Jones, se sintió conmovido, alabando a la comunidad por unirse en el caso y dirigiendo las donaciones a Hart. Pero mientras Dani se recuperaba, Jones pidió ayuda al público: necesitaba encontrar a la persona que había hecho eso.
"No puedo describir con palabras el disgusto que estoy sintiendo ahora mismo", escribió. "Trabajaremos diligentemente para encontrar quién hizo esto y buscar justicia".
Días después la búsqueda había finalizado. Jones no tuvo que buscar demasiado para descubrir quién era el propietario de Dani: era la misma persona que la había "encontrado" tirada en la carretera – y que se inventó toda la historia sólo para conseguir asistencia veterinaria gratuita.
El sheriff dijo que los investigadores supieron por la propietaria, que no fue identificada, que el perro se había cortado el cuello en realidad después de correr hacia una valla de alambre de púas. Como el dueño no podía permitirse llevarlo veterinario, la persona fingió "encontrar" al perro maltratado en la carretera e inventar una horrible historia.
Las marcas rojas alrededor del hocico no venían del uso de una cinta adhesiva, sino del bozal que le colocaba su ama durante varias horas al día porque Dani "estaba destrozando objetos de su casa y se había vuelto agresivo con otros perros".
Jones dijo que el perrito fue llevado al veterinario de nuevo, y que descubrieron que la lesión en el cuello no fue intencional. No reveló si la oficina presentó cargos criminales, pero los trabajadores de Hart Cincinnati, donde el perro fue adoptado en 2011, dijeron que esperaba que lo hicieran.
"Se han derramado lágrimas. Hemos estamos enfadados. Hemos estado tristes. Teníamos ganas de vomitar. Fue todo un cúmulo de emociones", dijo Katie Goodpaster de Hart a Fox19. "Estamos insistiendo para que se presenten cargos".
Como la mayoría de los engaños, la llamada de ayuda de Jones se volvió viral, convirtiéndose en tema internacional. El New York Daily News dijo "Los agentes cazan al psicópata que le cerró la boca al perro y la rajó la garganta". Yahoo News
Australia escribió, "Buscan a unos dueños después de que torturaran a un perro con horribles heridas". Un amante de los animales incluso empezó una petición, instando al fiscal del condado de Butler a castigar al abusador de animales con toda la fuerza de la ley.
No está claro lo que le ocurrirá al propietario o a Dani, pero Hart Cincinnati dijo que pagará la cirugía del perro y su recuperación.