La madrugada del miércoles, junto a otros dos cómplices, entró a la casa de una familia en Russell, Maipú. Su objetivo era hacerse de una supuesta cuantiosa suma de dinero y estaba dispuesto a todo: el propietario lo enfrentó y le descargó un cartucho de escopeta sobre su pecho.
Sin embargo, Cristian Reina Flores (32), el asaltante, disparó antes y acabó con la vida de Héctor Osvaldo Quiroga (59), el padre de la familia atacada por delincuentes y un querido comerciante del lugar.
Tras el homicidio, Reina, malherido, y sus cómplices escaparon corriendo. El baleado no pudo seguir el ritmo de la huida y fue abandonado por sus compañeros en una finca.
En un intento desesperado, los dos ladrones ilesos cortaron ramas de olivos e intentaron ocultar a Reina. Efectivos del grupo operativo de Maipú lograron apresarlo a los pocos minutos del brutal crimen en su escondite improvisado.
“Seguimos los rastros de sangre y lo encontramos tirado entre los olivos. No fue una detención inmediata, primero tuvimos que asistirlo”, relató una de los efectivos que participó del operativo.
Cristian Reina Flores (32) está acusado de ser el delincuente que apretó el gatillo. El dolor de familiares y amigos de la víctima se incrementó cuando se conoció que el presunto asesino debería haber estado preso.
Cristian Reina Flores debía cumplir su condena de 18 años de prisión en el año 2021. Pero la decisión de un juez le permitió ganar la calle en septiembre de 2017, cuatro años antes de lo previsto.