Independiente acumuló ayer su sexta temporada consecutiva sin comenzar con el pie derecho. Este Azul tiene problemas de bujías: le cuesta arrancar.
Este maleficio arrancó en la B Nacional 2012-2013, cuando el Azul igualó 0-0 en Isidro Casanovas, ante el Almirante Brown de Blas Armando Giunta. En la 2013-2014 el ‘Ogro’ iba a ser Sportivo Belgrano de San Francisco, que vencía en aquella oportunidad por 1 a 0 a Independiente, que otra vez comenzaba en condición de visitante.
En el Transitorio 2014 la suerte no iba a cambiar. Sarmiento de Junín iba a ser el escalón número uno de esa famosa temporada que ponía diez ascensos en juego. El 0-0, en provincia de Buenos Aires, se tomaba como un inicio prometedor. No iba a ser buena la campaña del Azul.
En la 2015, otra vez se presentaba en la fecha 1 fuera del Bautista Gargantini. El 0-1 en la Tacita de Plata, ante Gimnasia de Jujuy, estiraba la racha adversa a cuatro años. En la temporada 2016, por fin la Lepra debutaba en casa. Fue 0-0 ante Villa Dálmine. El maleficio no se solucionaba con la localía. Ayer, otra derrota.
¿Y el uso obligatorio de colchonetas en paredes?
La muerte de Emanuel Ortega tras golpear su cabeza con una pared lateral, en mayo del año pasado, encendía la alerta y AFA exigía el uso de colchonetas para recubrir estas paredes.
A Madryn, la medida no llegó. Ayer Curuchet golpeó su cabeza con una pared y debió ser hospitalizado.
Por suerte los estudios, más tarde, mostraban que no habían lesiones graves que lamentar. ¿Y las medidas de precaución? ¿Esperamos otra desgracia?
