El malbec, se sabe, encontró su lugar en el mundo en Mendoza. Ya consolidado como fenómeno, cada dos años desde 2000 mide su calidad con la de expresiones de otros terruños a través del concurso Malbec al Mundo, que organiza la Apeaa (Asociación de Profesionales en Enología y Alimentos de Argentina) que desde ayer transita su VII edición y reúne a 280 ejemplares argentinos y de distintos puntos del globo en la Nave Cultural.
Además de Chile, el segundo país participante con más muestras inscriptas después del anfitrión, 45 jueces, entre enólogos y periodistas, evaluarán hasta mañana a diversos malbec de Uruguay, Brasil, Ecuador, Francia, España y, por primera vez, de México, tierra del tequila. Una prueba de cómo el emblema argentino cruzó fronteras insospechadas.
Los vinos tranquilos dominan las 56 categorías, que van desde 100% de pureza varietal hasta blends con un 50% del caldo ícono, e incluyen a especiales o licorosos, grapas e incluso espumantes. De hecho, en esta categoría espera su debut, entre otros, un rosado de Río Grande do Sul, corazón vitivinícola de Brasil. Por lo pronto, el desfile de ayer bastó para que los jueces con experiencia hablaran de "calidad creciente".
Apoyo y análisis
Según datos de Apeaa, más de 100 bodegas registraron sus ejemplares para competir en una edición que cuenta con el respaldo de la comuna de Capital por ser la Ciudad "Capital Internacional del Malbec". Cabe recordar que la provincia es una de las 9 GWC (Great Wine Capitals).
Otra novedad es que Malbec al Mundo tiene respaldo de la Unión Internacional de Enólogos, que ya patrocina a Vinandino, el restante concurso con sello mendocino. "Luego de años logramos que más allá de apoyar a un evento por ciudad, la Unión avalara también a Malbec como el concurso del varietal que identifica a Argentina. Se abre la puerta para hacerlo con los de otros países, como el Tanat al Mundo de Uruguay, y el Carmenere de Chile, y como lo tiene el Tempranillo español", explicó Alejandra Lozano, directiva de Apeaa y coordinadora del concurso.
La primera jornada ya postuló a uno de los participantes, un cosecha 2011 para la Gran Medalla de Oro, el máximo galardón posible, con 94 puntos. En la edición 2010 se lo habían llevado 3 malbec del año, de Trapiche, Vinorum y Cooperativa La Riojana.
En la mesa de degustación presidida por Mariano Di Paola, head winemaker de La Rural, hubo consenso en considerarlo distinto, y el resto coronó el hallazgo con un aplauso. Con entusiasmo y un toque de humor Di Paola consideró que "coincidimos plenamente, a todos nos pareció fantástico. Cuando caía en la copa se notaba su densidad, su complejidad y su fruta, tanto que nos daba más ganas de dejarlo ir hacia adentro después de degustarlo".
El profesional será uno de los disertantes hoy, en la segunda jornada del concurso, que promete un doble programa. Por la mañana seguirán las rondas de degustación, y por la tarde, desde las 18, charlas técnico-científicas en la Enoteca. Junto a Di Paola, que expondrá sobre "Gestión de maceración y uso de herramientas tecnológicas en la vinificación de Malbec", José Galante, de Salentein, tendrá como tema la "Huella aromática de Malbec de altura". Por su parte, Fernando Buscema, de bodega Caro analizará comparativamente las características del malbec argentino y el californiano, en tanto que el académico Federico Berli, de la Facultad de Ciencias Agrarias, se referirá a los rasgos de los cultivos en altura.
Mañana viernes 23 se conocerán los ganadores del concurso, durante la cena de clausura y gala de premiación de los mejores "Malbec del Mundo".